“Bajaron la carne, pero del camión”

El precio del dólar estadounidense mantiene condicionada la economía venezolana y los embates de esa circunstancia realmente lo padecen las mujeres y los hombres del pueblo. El “verde gringo” dos veces al día hace estragos al bolívar y prácticamente pulveriza los sueldos del humilde trabajador.


La carne y sus precios son un tema de opinión pública, entre comprarla o no

Muestra de ello son los precios actuales de alimentos ricos en proteínas de origen animal, que sin duda alguna la mayoría están por las nubes. La carne de res, por ejemplo, cada día se hace difícil comprarla, por lo que en muchos hogares apuntarla no es una opción en la lista de mercado.

Ayer, el dólar de acuerdo a la tasa del Banco Centro de Venezuela, en el tipo de cambio referencial, quedó establecido después de la dos de la tarde, en Bs. 3.712.699,57, mientras que la cotización en el portal @enparalelovzla se fijó en Bs. 3.958.032,43. Es decir, el precio de un kilo de carne de primera en el Mercado Principal de Maracay oscilaba entre 19 y 20 millones de bolívares, según la aceptación y valoración de la moneda extranjera por establecimiento (oficial o paralelo).

Mercedes Orta, compradora, afirmó que cada día la situación está más difícil, resaltando “todo está por las nubes”. Indicó que hace el sacrificio para comprar medio kilo de carne de primera para mantener una alimentación balanceada.
“Siempre trato de comprar, porque es necesario, pero con estos precios verdaderamente se hace cuesta arriba. Acabo de pagar diez millones por la mitad de un kilo de solomo, eso puede dar una idea de cómo está esto”, añadió.

Por su parte Ingrid Trejo expuso “cómo hace uno, hay que comprar la carne es necesaria como alimento”. Precisó que ella y su familia llevaban de dos y tres kilos de esta proteína semanalmente, pero que la situación los ha obligado llevar “tal vez la misma cantidad cada quince días o durante el mes”.

Ojalá Maduro tomara una decisión buena para ayudar al pueblo, comentó la dama, enfatizando “segura estoy que él sí debe comer carne todos los días, de primera, con todos los juguetes. Pregunto, qué puede hacer un trabajador con un sueldo integral (Bs. 10.500.000,00) para poder comer solomo cuando su precio es de casi veinte millones de bolívares. Con el corazón en la mano, me gustaría que eso me lo respondiera el Presidente”, aseguró Trejo.

El señor José Rangel manifestó que en tiempos de bonanza compraba de dos o tres kilos de carne, pero que en los actuales momentos está llevando para su casa “de bromita medio kilo de molida (pulpa negra)”, la cual cocinará en salsa con bastante aliños y verduras para rendirla.

“La gente se alegra cuando está cerca del mercado y escucha -bajaron la carne- y más de uno pregunta dónde… bajaron la carne, pero del camión, porque los precios se fueron por las nubes, volando muy alto. Realmente esto es una locura y los vendedores no pueden hacer mucho porque están como nosotros, atados de manos”.

Rangel puntualizó que el dólar tiene mucho que ver con este grave panorama, pero añadió que la falta de control por el Gobierno es otro atenuante de lo que está ocurriendo. “Hoy llevo medio kilo, no sé cuánto llevaré mañana, esto está feo“, exclamó el comprador.

ANTES SE BOTABA

Las menudencias de las reces se han convertido en una opción para los compradores, como una forma de sustituir la carne de primera y segunda.

Aunque no se salva de lo cotización en “verdes”, las menudencias son más alcanzables que el solomo y la pulpa negra por nombrar a algunos.

Entre las menudencias que más se venden se encuentran, el corazón, los riñones, el hígado, panza, pata y bofe. Muchas personas, entre vendedores y compradores han señalado que antes “cuando se tenía plata”, estas partes de la res se botaban o se le echaban a los animales; hoy son una elección para la mesas de los venezolanos.

CARNICEROS CON VENTAS FLOJAS

Pedro Álvarez: “Antes, en una semana vendía hasta tres reces, hoy es jueves y en lo que va de semana no he vendido media res. Los clientes están comprando día a día, pero prácticamente llevan de porción o puñito, hasta donde les alcance la plata. Esta situación también nos afecta a nosotros, porque tenemos que comprar en dólares”

Marco Ferreira: “Ese dólar nos tiene locos. No está dando tregua y los precios se elevan cada seis horas. Uds pueden ver como están las carnicerías aquí en el Mercado Principal de Maracay, vacías y con mucha carne. Ya no se sabe qué hacer” 

Carlos Rodríguez: “Los costos en moneda extranjera nos están matando, esto es increíble. Suben las cosas y la clientela va desapareciendo. Hasta las menudencias es difícil vender por los precios. Las personas llevan poco, ya no es como antes, que se llevaban un kilo de esto, otro de aquella y pedían una más de otra cosa. Ya no es igual”.

TABLA DE PRECIOS

  • Solomo Bs.20.000.000,00
  • Solomo abierto Bs.18.000.000,00
  • Pulpa Negra Bs.19.000.000,00
  • Ganso Bs.19.000.000,00
  • Chocozuela Bs.19.000.000,00
  • Lagarto Bs.18.000.000,00
  • Paleta Bs.18.000.000,00
  • Pecho Bs.18.000.000,00
  • Espalda Bs.18.000.000,00
  • Costilla Bs.10.000.000,00
  • Corazón (pieza) Bs.12.000.000,00
  • Riñones Bs.10.300.000,00
  • Lengua (pieza) Bs.12.000.000,00
  • Hígado Bs.10.000.000,00
  • Pata Bs.5.000.000,00
  • Panza Bs.5.000.000,00
  • Bofe Bs.3.000.000,00
  • Pernil con cuero Bs.14.000.000,00

HBRI –elsiglo