A pesar de que el inicio de la semana radical paraliza algunos servicios de transporte público, el Terminal de Maracay amaneció ayer con bastante afluencia de usuarios, que se desplazarían internamente o hacia los municipios.
Ángel Gutiérrez, presidente del Terminal, informó que, cumpliendo con los lineamientos nacionales, bajo el esquema 7+7, en esta oportunidad para la semana radical se trabajará desde las 6 de la mañana y hasta las 5 de la tarde.
Detalló que únicamente se estarán prestando sus servicios las rutas urbanas y suburbanas; “las urbanas son las que hacen vida dentro del municipio Girardot y suburbanas dentro del estado Aragua, es decir hacia Palo Negro, Cagua, Santa Cruz, La Villa, entre otros”.
Aclaró que hasta la próxima semana flexible quedan suspendidos los traslados fuera del estado; “se está cumpliendo con el mandato de nuestro presidente Nicolás Maduro y le hacemos el llamado a los usuarios a respetar las normas y a no usar el traslado pirata hacia otros estados, pues va contra la ley y podría representar un riesgo para su salud, aparte, el excesivo costo que cobran los piratas por el traslado”.
HORARIO COMERCIAL
En cuanto al horario comercial, Gutiérrez señaló que únicamente están autorizados a abrir los que venden alimentos, en el horario de 7 de la mañana a 2:00 pm.
“Es importante que los comerciante acaten las medidas de bioseguridad como el uso del gel antibacterial y tapaboca, y que respeten los horarios de atención al público o serán sancionados por lo acatar la ley”.
TRANSPORTISTAS PREOCUPADOS
Por su parte, los transportistas manifestaron preocupación por la falta de pasajeros hacia otros municipios. “Cuando comienza la semana radical es sorprendente la poca afluencia de personas y eso nos preocupa porque contrarresta la ganancia de nosotros”, expresó Luis González.
De igual forma, José Echeverría comentó: “La cosa se pone difícil, pues tenemos que hacer magia para conseguir el combustible, y de paso luchar con las semanas radicales, donde tenemos que rifar los puestos para tener una medio entrada de dinero. Cumplimos con las normas de bioseguridad, pero entre la falta de pasajeros y el bachaqueo de combustible nos tiene aniquilados”.
IRIOS MÉNDEZ | el siglo
