Murió caficultor tras encunetarse vehículo en la Autopista Regional

Un hombre dedicado al cultivo del café en el estado Portuguesa, perdió la vida de manera instantánea en un accidente de tránsito que se registró en horas de la madrugada de ayer en el kilómetro 65 de la Autopista Regional del Centro.


El cuerpo del productor de café fue trasladado a la morgue de Caña de Azúcar

De acuerdo a la información aportada por funcionarios de Tránsito Terrestre que estuvieron en el lugar del suceso, el incidente ocurrió a las 3:00 de la madrugada, sentido Maracay-Caracas.

La víctima de este hecho quedó identificada como Pedro José Torrealba, de 36 años de edad, oriundo de Biscucuy, dejó en la orfandad a dos menores de tres y otro de dos añitos.


William Pérez, mecánico y acompañante del caficultor que murió en el accidente

El caficultor se trasladaba a la ciudad capital para vender el carro donde ocurrió el accidente, una Toyota Autana, color plateado.

Torrealba iba con su mecánico, un joven que responde al nombre de William Pérez, a quien afortunadamente no le ocurrió nada.

El acompañante manifestó no saber qué causó el accidente, enfatizando que el conductor tenía mucha precaución cuando viajaba trayectos largos.

“Salimos de Biscucuy cerca de las 8:00 de la noche del sábado, porque Pedro iba a vender la camioneta ayer domingo.

Él me pidió que lo acompañara para no venirse solo. A ese hombre no le gustaba correr, era tranquilo y pasó ahora esta desgracia, que lamentable”, resaltó.

Pérez, quien se encontraba en la morgue de Caña de Azúcar, en espera que le entregaran el cuerpo de su amigo, indicó que al momento del accidente iba dormido y despertó cuando la camioneta se encunetó de golpe”.

“Estoy seguro acababa de quedarme dormido. Me desperté porque comencé a moverme de un lado a otro y el carro cayó en la cuneta. Estaba muy oscuro y en medio del mareo buscaba a mi amigo, que no estaba en el carro”, destacó.

Resaltó el acompañante del caficultor que salió del vehículo y pese a la oscuridad buscó a Torrealba. “Lo encontré como a diez metros del carro. Estaba en ese sitio, muerto, con una cortada fea en el estómago, creo que se hirió con el parabrisas”, mencionó Pérez.

En medio de la desesperación, el acompañante dijo que pidió ayuda a algunos conductores que pasaban por el sitio, quienes notificaron a las autoridades competentes. “Es muy lamentable esto, era un buen hombre, trabajador, buen hijo. Era el mayor de tres hermanos, buen padre, ahora sus hijos quedaron huérfanos”, recalcó con pesar el mecánico.

William Pérez no dejó de lamentar lo ocurrido en el servicio forense, pero también agradeció a Dios, porque realmente no le pasó nada. “De verdad estas cosas no se entienden, Pedro perdió la vida en estas circunstancias y a mi no me pasó nada, ni un rasguño, le doy gracias al Todopoderoso porque mi esposa, en una o dos semanas me dará mi primer hijo. No sé qué provocó el accidente, pero mi Dios me protegió, estoy vivo de milagro”, puntualizó el muchacho.

Sobre el accidente, las autoridades no se han pronunciado oficialmente al respecto. Se considera que la camioneta perdió la estabilidad a causa del asfalto húmedo, aunque para el momento del accidente no estaba lloviendo.

El cuerpo del caficultor sería entregado en horas de la tarde de ayer, luego de la autopsia de ley, para ser trasladado a Biscucuy, donde recibirá cristiana sepultura.

HBRI. | elsiglo