El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció este miércoles que exigirá el reconocimiento del actual Parlamento, de mayoría chavista, el levantamiento de sanciones económicas contra su Gobierno y la «devolución» de activos en la mesa de negociación que propuso el líder opositor Juan Guaidó.
En una jornada de trabajo para evaluar el proyecto de Ley de Zonas Económicas Especiales; Maduro se refirió al diálogo que estima emprender con la oposición liderada por Guaidó y dijo que llevará estos tres puntos a la mesa.
«El primero de todos (es) el levantamiento inmediato de todas las sanciones y medidas coercitivas unilaterales contra Venezuela, inmediato», dijo.
Como segundo punto en la agenda estará «el reconocimiento pleno de la Asamblea Nacional Legítima y de los poderes establecidos en Venezuela»; y en tercer lugar «la devolución de las cuentas bancarias a las instituciones y de los activos a las instituciones», apuntó.
«¿Quieren negociar? pongo esos tres puntos y vamos donde ustedes quieran. En Venezuela, en el Caribe, en América Latina, en Noruega, donde quieran nos sentamos. Cuando quieran, donde quieran y como quieran», añadió.
CAMINO ELECTORAL
El mandatario resaltó además que se encuentra «feliz» porque la «derecha extremista» va al camino electoral y de negociación.
«Estoy de acuerdo, lo ratifico, con una gran mesa de diálogo nacional; estoy de acuerdo que participe el Gobierno de Noruega, estoy de acuerdo que se invite a diversos sectores internacionales», reiteró.
El pasado 14 de mayo, Maduro adelantó que estaba elaborando una agenda y que la misma incluiría el «rescate de todos los recursos» de la nación; entre ellos Citgo y Monómeros; filiales de la petrolera estatal PDVSA en Estados Unidos y de la petroquímica pública Pequiven en Colombia, respectivamente.
Los Gobiernos de esos dos países no reconocen a Maduro como presidente de Venezuela; sino a Guaidó, razón por la que han reconocido las juntas administrativas designadas por el opositor.
La negociación entre Guaidó; y Maduro está planteada desde el pasado 11 de mayo cuando el opositor lanzó la propuesta sobre la mesa a fin de alcanzar lo que denominó; como «acuerdo de salvación nacional» por el que pide elecciones generales libres y justas.
Maduro respondió a la propuesta diciendo que estaba «listo» para la negociación, pero aún no se ha concretado.