«Captain America», la icónica moto Harley-Davidson conducida por Peter Fonda en el filme contracultural «Easy Rider» (1969), será subastada el próximo 5 de junio en Estados Unidos por un valor que oscila entre 300.000 y 5000.000 dólares, informó este jueves en un comunicado la casa de subastas.
Conocida como «Capitán América» por la distintiva bandera estadounidense pintada en su depósito de gasolina, «la motocicleta más icónica del mundo» -como la califica la compañía teXana Dan Kruse Classics- es parte de la historia del cine estadounidense.
«Esta motocicleta es una leyenda y es uno de los símbolos icónicos de la década de 1960. Representa el anhelo de una vida más sencilla, de aventuras y de caminos abiertos. Adornaría cualquier colección de automóviles, ya sea privada o en un museo», dijo Dan Kruse, propietario de la casa de subastas que lleva su nombre.
En 1996, el antiguo propietario de esta motocicleta, el coleccionista de vehículos Gary Graham, vendió «Captain American» en la subasta de Dan Kruse Classic a Gordon Granger.
Se restauró la motocicleta para autentificarla y, desde entonces, estuvo guardada en Austin (Texas), donde afortunadamente se salvó de un incendio que tuvo lugar en 2010, señaló la compañía.
Los cinéfilos de todo el mundo recuerdan las escenas de esta mítica «road movie» que marcó a toda una generación con un joven Peter Fonda (1940-2019) con gafas de sol y chaqueta de cuero conduciendo por infinitas carreteras su Harley-Davidson.
Hijo del reconocido actor Henry Fonda y hermano de la actriz Jane Fonda, Peter Fonda cautivó a los amantes del cine con su papel en esta cinta -de la que fue productor y coguionista junto con Dennis Hopper y Terry Southern-, por la que además fue nominado a un Óscar al mejor guión original.
Fonda y Hopper interpretan en este filme de culto a dos motoristas que viajan por el suroeste de Estados Unidos llevando las ganancias de un negocio de drogas, pero al mismo tiempo encarnan el sueño hippie.
«El éxito de ‘Easy Rider’ inició una nueva era cinematográfica de Hollywood a principios de la década de 1970», resaltó la casa de subastas.
«Easy Rider» no solo visibilizó el movimiento y la utopía hippie, el rock and roll y la psicodelia, sino que convirtió las motocicletas que conducían Fonda y Hopper en personajes reales de la película.
En la película se utilizaron 4 motocicletas Harley-Davidson que pertenecieron a la Policía y fueron compradas en una subasta por 500 dólares y reconstruidas para la película, señaló la compañía.