“Como camellos” dicen vivir los habitantes de La Coromoto y José Félix Ribas, pues se ven en la obligación de buscar agua en el desierto.
En este sentido, Víctor Becerra relató que realiza “entre 2 o 3 viajes diarios para poder llenar los pipotes que hay en la casa, yo soy habitante de José Félix Ribas y debo caminar hasta el Arsenal para poder abastecerme”.
Por su parte, Jackeline Vargas indicó: “Yo vengo de José Félix Ribas, tengo una condición en la cadera que no me deja caminar ni llevar mucho peso, pero no tengo otra opción que salir a buscar agua, porque en el sector donde vivo no hay desde hace un mes aproximadamente”.
Igualmente Lorenzo Acevedo comentó: “Tenemos tres semanas en La Coromoto sin agua, normalmente llega pero de chorrito, que no alcanza para llenar un tanque, o simplemente recogerla, porque además viene sucia. Estamos cansados de hacer viajes en carruchas, necesitamos nuestro tiempo para salir a trabajar”.