Usan sombreros altos y llamativos porque, por insólito que parezca, consideraban que dicho uniforme intimidaría a los ejércitos rivales. Buscaban parecer más altos y, por ende, más temibles.
A estos sombreros se les conoce como «pieles de oso» porque, efectivamente, están fabricados con piel de osos negros canadienses. Y, aunque no sacrifican a los osos específicamente para realizar los cascos, la idea incomoda cada vez más a los ciudadanos. Por ello, Reino Unido planea prohibir por completo la venta de pieles de animales.