“Lo que más afecta es la parte emocional”

Grisel García es Licenciada en Enfermería, con especialidad en Terapia Intensiva y se contagió con Coronavirus a finales del mes de noviembre de 2020: desde esa fecha infausta comenzó una dura batalla, que le tocó pelear junto su hijo.


GRISEL GARCÍA, ENFERMERA

García comentó que su contagio no fue hospitalario sino comunitario. “Para esa fecha murió una tía, fui al velorio donde nos reunimos puros familiares. Como mi tía no fue diagnosticada con Covid permitieron el velorio por cuatro horas, todo se desarrolló de manera normal. Sin embargo, al pasar unos días comencé a sentirme mal y sin dudar me dirigí al Hospital Central de Maracay, lugar donde trabajo y allí me hicieron la prueba, que dio positivo”.

ESTAR VIVA ES UN MILAGRO

“Cuando tu trabajas con personas en la Unidad de Cuidados Intensivos, son muchas cosas que ves y que aprendes, no sólo del paciente, sino de sus familiares, que viven día a día con sus seres queridos la enfermedad”, relató.

“Pensando en esas situaciones que me han tocado vivir como enfermera, decidí quedarme en casa y hacerme todo el tratamiento allí, junto a mi hijo, que también se contagió. Mi caso fue más grave porque me compliqué con problemas respiratorios y requerí de oxígeno. Yo caí en cama como el 25 de noviembre, si mal no recuerdo, y logré levantarme de mi cama el 10 de diciembre”.

LA PARTE EMOCIONAL ES LA QUE MÁS AFECTA

“Cuando eres trabajador de la salud estás preparado para resolver cualquier emergencia, pero cuando te toca resolver un problema de salud, que te involucra a ti directamente, cuesta asumirlo”, destacó.

“En el caso particular de los enfermos de Covid, la parte emocional es la que más afecta, porque debes permanecer mucho tiempo aislado, separado de tu familia, de tu casa, de tu rutina diaria y eso por más que la gente diga que no, sí afecta”.

Enseguida que fui diagnosticada – añadió Grisel-, en lo primero que pensé fue en mi hijo y en la angustia de saber que se quedaría solo, también vino a mi mente la posibilidad que podría complicarme y dejar este plano terrenal, son muchas cosas las que se te vienen a la mente en esos segundos que recibes el resultado de la prueba, en ese segundo en que dice que eres positivo, que tienes coronavirus”.

“Recuerdo claramente que tuve una crisis en la que no podía respirar y le dije a mi hijo, que jamás en su vida había agarrado una inyectadora, que me inyectara porque sentía que no podía respirar”, nos contó con un tono de voz que describe esos instantes decisivos de su guerra contra el virus que invadió su cuerpo.

EL PROTOCOLO SANITARIO DESDE CASA

“Cuando comencé a tener complicaciones en la parte respiratoria, le dije a mi hijo: Esta es la parte más crítica de la enfermedad y debía estar más aislada. Me encerré en el cuarto y le di las indicaciones, él me dejaba la comida, cambiaba las sábanas y salía del cuarto. Jamás lo dejé entrar al cuarto sin tapaboca, sin guantes y el alcohol para desinfectarse siempre a la mano, recuerdo que le dije si me desmayo pide ayuda y sácame al hospital”.

“Afortunadamente para mí, logré superar la enfermedad, pero también perdí un ser querido que lamentablemente murió en el intento”, lamentó García.

“La tristeza me arropó en su momento, pero había otra parte de mí que me estimuló a seguir luchando, con esta enfermedad lo importante es respirar, lo hacemos tan natural que ni siquiera te das cuenta lo importante que es”.

COMENZAR DE CERO

“Después que fui dada de alta comenzó otro proceso, tenía mucho miedo de quedarme dormida, ya que tenía temor de no despertar, aprendí a respirar y controlarme, pues algunas veces pensaba que me faltaba el aire”, recordó.

“Cada quien vive sus experiencias, pero sin duda alguna que el temor más grande que te da cuando sabes que tienes el virus es de morir y dejar a tu familia y seres queridos”. Ante el horror particular que vivió recalcó: “Hay que cuidarse, lavarse las manos, respetar el distanciamiento social y usar el tapaboca. El Covid no es un mito, es una realidad, que te puede quitar la vida en un segundo”.

IRIOS MÉNDEZ | elsiglo
foto | JOEL ZAPATA