Maracayeros se las ingenian para trabajar en tiempo de pandemia

La pandemia ha obligado a las familias aragüeñas a improvisar negocios desde sus casas, que les permitan obtener un ingreso constante para costear los gastos diarios.


La pandemia la obligó a trabajar desde casa

Este es el caso de Jimmy Contreras, quien es de profesión herrero, sin embargo, desde hace 6 meses abrió un negocito en la acera frente a su casa, donde vende todo tipo de mercancía.

“En vista de la situación económica y que la profesión que aprendí que fue la herrería no estaba dando los dividendos para comprar la comida, pagar los gastos de la casa”.

Señaló que entre los productos que ofrece se encuentran plomería, zapatos, ropa usada y nueva, CD, cerraduras de puertas, aspas para ventiladores, “y si sale un tigrito de herrería lo voy a hacer”.

Por su parte, Luis Fernández relató que hace tres años se graduó de ingeniero en sistema, no obstante, actualmente se desempeña como vendedor de tortas y panes que hace en su casa.

“La situación es crítica y tengo dos hijos que mantener y como el sueldo no alcanza aprendí con una prima a hacer torta y panes y de eso vivo. No gasto pasaje y así me entra un dinerito para comprar comida y pagar los gastos personales y escolares de mis hijos”, señaló.

Mientras que Cointa González, quien se desempeña como zapatera desde hace 30 años, comentó. “Yo trabajaba en el centro de Maracay y debido a la pandemia no podemos trabajar la zona; por lo que me las ingenié e improvisé mi negocio frente al portón de mi casa”.

“En mi taller casero coso zapatos, cambio suelas, tapitas, también arreglo carteras”, dijo la zapatera. “El dinero está hecho lo que hay es que buscarlo y más en tiempo de crisis, y a los que trabajamos como buhoneros se nos hace difícil trabajar”.

IRIOS MÉNDEZ | elsiglo
foto | JOEL ZAPATA