Transporte a media máquina por escasez de combustible

Los choferes de distintas líneas que cubren rutas urbanas y suburbanas en la zona metropolitana de Maracay se mostraron ayer preocupados por la carencia de gasoil en las estaciones de servicio locales, lo que bajó el ritmo del transporte público a un mínimo.


Jhon Jairo León

En ese te sentido, Jhon Jairo León señaló que “durante viernes, sábado y domingo, escasamente trabajaron pocas unidades que cubren la ruta Terminal de Maracay – La Coromoto, mientras que otras nos quedamos en las colas perdiendo cuatro días de ingresos debido al problema con el gasoil”.

Los pasajeros se fueron guindando en las camionetas

Por su parte, René Jiménez indicó: “Yo estoy por mi parte desde el jueves pasado que llegué a las 3:00 am. Hemos avanzado porque han surtido, sin embargo, ya han pasado cuatro días y nada que han vuelto a surtir. Mi medio de ingreso es la camioneta y este fin de semana ha sido para el olvido y debo quedarme hasta que surta porque ya no tengo ni en la reserva”.

Las calles lucieron solas en toda la mañana de ayer en Maracay

Igualmente Julio Escobar resaltó: “Son ya cuatro días en la cola, esperando la supuesta llegada de la gandola con gasoil, y ya se puede ver en la extensión de la cola la carencia del combustible. Aquí se pasa hambre, sed, de todo, no hemos podido trabajar y por los vientos que soplan empezaremos la semana igual”.

Algunas personas optaron por caminar

Entre tanto, Rafael González comentó: “Lo peor de todo esto es que no tenemos más para dónde coger, no hay ni una gota de gasoil, para poder trabajar, lo que nos queda es seguir en la cola hasta que llegue el combustible: es pérdida para nosotros”.

Rafael González

LARGA COLA

En recorrido realizado por Maracay, pudimos observar que la cola para abastecer de gasoil en la estación de servicio de Santa Ana, ubicada detrás del Terminal de Maracay, era ayer de aproximadamente tres kilómetros.
Como consecuencia, el transporte se movió a media máquina por la ciudad. Los usuarios se vieron en la necesidad de caminar hasta sus destinos, debido a la escasez de busetas.

Sin embargo, hubo quien pacientemente esperó por una camioneta y optó por irse “guindando” hasta su destino.

JOSÉ CARPIO G | elsiglo
foto | JOEL ZAPATA