El pasado sábado 20 de enero, el nuevo secretario de Estado de los Estados Unidos, (EE.UU.) Antony Blinken, tras sostener una audiencia con el Senado, están considerando reestablecer el intercambio de crudo venezolano por diésel, y aliviar un poco las sanciones clave al país.
Sin embargo, la recién instalada administración del presidente Joe Biden, mantendrán aseguró que mantendrán la política de presión hacia el Gobierno de Venezuela para que se realicen una nuevas elecciones, según expresó Bliken.
“Creo que hay más que debemos tratar de hacer en términos de asistencia humanitaria, dado el tremendo sufrimiento del pueblo venezolano”, afirma el nuevo secretario de Estado norteamericano.
Con esta nueva postura, el Gobierno de Estados Unidos evalúa permitir que las empresas no estadounidenses vuelvan a realizar intercambios de diésel, y restablecer las condiciones de exención menos restrictivas para las empresas norteamericanas con activos venezolana, como parte de la inclinaciones humanitarias que busca instaurar la gestión de Biden.
Después de que EE.UU impusiera sanciones petroleras a Venezuela en enero de 2019, Repsol de España, Eni de Italia y Reliance de India participaron en transacciones de diésel con la estatal Pdvsa por motivos humanitarios, con la aprobación a regañadientes del Tesoro de EE.UU.
El convenio que tenían estas empresas en el caso de Repsol y Ene era aceptar el crudo venezolana como parte del pago de Pdvsa por el gas natural de su campo Perla y otras deudas, con diésel bajo en azufre con diésel bajo en azufre enviado de regreso para liquidar sus libros. El principal proveedor Reliance recogió crudo venezolano a cambio de diésel en intercambios directos. Las sanciones excluyen a las empresas estadounidenses de todo el comercio petrolero venezolano.
A pesar de esto, las sanciones impuestas no prohibieron el intercambio de diésel y entre las empresas, pero los funcionarios estadounidenses llamaron a las tres empresas en agosto del 2020 para decirles que no tolerarían más estos tratos, prohibiéndoles realizar esto intercambios causándole una reducción de diésel a finales de octubre a Venezuela, generando escasez en este combustible.
Desde que terminaron los intercambios de diésel hace tres meses, Venezuela ha dependido principalmente de los inventarios, pero se espera que estos se agoten a fines de marzo, lo que podría agravar los cortes de energía y la escasez de alimentos.
