Baño solidario “bajo cero” en Viena para ayudar a las personas sin hogar

Decenas de personas se han bañado hoy en un lago helado de Viena para recaudar fondos para una ONG que se dedica a ayudar a las personas sin hogar.

Bajo una fina capa de lluvia y con el agua a una temperatura cercana a los cero grados, los “valientes” nadadores se han reunido en Seestadt, un barrio a las afueras de la capital austríaca.

El evento ha sido organizado por Josef Köberl (1977), el “hombre de hielo” austríaco, cuyas hazañas de natación en aguas heladas son conocidas en todo el país.

El atleta explica que con este gesto, quieren solidarizarse con las personas sin techo que pasan frío en invierno y denunciar el “trato gélido” que a su entender recibe este colectivo por parte de la clase política.

“Somos los nadadores de hielo y nos encanta el frío”, declaró a Efe Köberl, momentos antes de sumergirse en el agua.

Los fondos recaudados en el acto solidario irán destinados a Neuner Haus, una institución que ayuda a personas sin hogar a recibir atención médica adecuada.

El baño se ha realizado cumpliendo escrupulosamente con las medidas sanitarias que dictan las autoridades, ya que Austria se encuentra en este momento en medio de su tercer confinamiento para frenar la expansión del coronavirus.

Köberl acaparó la atención de los medios nacionales e internacionales el pasado mes de septiembre, cuando batió su propio récord mundial de permanencia bajo el hielo: consiguió aguantar poco más de dos horas y media metido en una cabina llena de cubitos de hielo.

Entonces, su objetivo era dar visibilidad al drama de la desaparición de los glaciares. Hoy busca lograr una menor frialdad social.