Elba Ramos, quien se acercó este martes al Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses en Caña de Azúcar, aclaró que su sobrino muerto en un presunto acto de resistencia a la autoridad con funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana, no formaba parte de ninguna banda delictiva que azota a los trabajadores del campo y ganaderos del sur del estado Aragua.
Elba Ramos dijo que su sobrino fue asesinado a tiros
Ese ciudadano, identificado como Ronald José Seijas Landaeta, de 32 años de edad, trabajaba en una quesera en la población de Barbacoas del municipio Urdaneta al sur de Aragua.
El día sábado a las 5:00 de la mañana, “mi sobrino se trasladó al caserío Monte Oscuro a buscar la leche, materia prima que es utilizada para elaborar el queso llanero, y en el trayecto se topó con una comisión de la Guardia Nacional.
Los militares, sin pensarlo dos veces, lo relacionaron con un miembro de una banda delictiva y le cayeron a tiros. Luego aparentaron un enfrentamiento cuando no hubo nada de esa acción.
“Mi sobrino no acostumbraba a manejar armas de fuego, y lamentablemente los guardias le “sembraron” un armamento para justificar su acción“, agregó la denunciante.
“Entiendo que en esa jurisdicción hay cualquier cantidad de grupos delictivos, y los cuerpos policiales y militares saben quienes son. No pueden actuar a la ligera y matar a quien se consigan en su camino”, expresó la querellante.
“Aunque Ronald José Seijas Landaeta, padre de dos hijos y un ciudadano de buena conducta, no lo voy a revivir con mis declaraciones, pero si quiero dejar claro que no era ningún delincuente”, agregó.
“Sería interesante que los funcionarios del Cicpc investiguen ese hecho y digan sin pelos en la lengua quién era mi sobrino”, finalizó diciendo la señora Ramos, quien se mostró muy conmovida y destruida de dolor ante los hechos registrados en Monte Oscuro.
