La Oficina de Estadísticas Nacionales del Reino Unido revela que la inflación británica inicia la línea ascendente como resultado del confinamiento y otras restricciones adoptadas para enfrentar la crisis sanitaria del Covid-19; así como la salida del Reino Unido de la Unión Europea.
Datos oficiales de este organismo británico, que se encarga de la creación y publicación de estadísticas en los campos de la economía, reflejan que los precios al consumidor experimentaron un repunte del 0,6% en términos anuales, tras un incremento del 0,3% en el mes de noviembre.
Por otra parte, economistas encuestados por la agencia Reuters coincidieron en establecer una tasa del 0,5%.
El aumento de los precios mundiales del petróleo impulsó el valor del combustible, y también se elevó el precio de la ropa.
Entre tanto, la flexibilización temporal de las restricciones al viaje por el coronavirus propició la elevación de las tarifas aéreas y marítimas.
Desde mediados de 2019, los niveles de inflación se han ubicado por debajo del objetivo del 2% del Banco de Inglaterra y mientras la economía se desde mediados de 2019,la pandemia de Covid-19 la hundió hasta llegar a cero.
