A través de un live en su cuenta personal en Instagram, el comisario general Douglas Rico, director nacional del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, ratificó, de acuerdo al resultado de las investigaciones, que la muerte del catequista de Aragua, identificado como Ángel Isaac Ortega, de 19 años de edad, fue por venganza.
Los autores materiales de ese crimen quedaron identificados como Edwar Josué Guzmán Moreno (28), apodado “Sexo”; Aron Moisés Delgado Landaeta (21), apodado “El Varón”; Carlos Daniel Padilla Vergara (20) conocido como “El Colombianito”.
Así como José Francisco Hernández Medina, alias “El José”, quien anda prófugo de la justicia y en cualquier momento tendrá que rendir cuentas ante la justicia aragüeña. Lo buscan entre cielo y tierra, pero muy pronto caerá en manos de la justicia.
Detalló que Ortega trabajaba en un negocio vinculado con la venta de donas y ahí conoció a sus verdugos. Con el pasar de las semanas, Ángel se percató que Eduardo José y Aron Moisés, sustraían mercancía para su beneficio personal.
Ambos delincuentes lo invitaron a ser cómplice de sus vagamunderías y el joven se negó a esa acción delictiva en reiteradas oportunidades.
A raíz de esa disyuntiva, entre ellos se originaron fuertes discusiones y por temor a ser denunciado ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, los sospechosos prepararon un plan macabro para sacarlo de circulación y así pasar desapercibidos.
Con la finalidad de pasar “agachado” debajo de la mesa, los supuestos amigos invitaron a Ortega a una fiesta y en un paraje solitario procedieron a ajusticiarlo, afirmó el funcionario policial.
Con el pasar de las horas, los homicidas se acercaron al sitio y colocaron los restos en una bolsa plástica, la cual fue abandonada en una cañería de aguas servidas en la cancha “Ratón” Márquez.
Como es del conocimiento público, Ortega fue secuestrado misteriosamente en noviembre del 2019 y su cadáver desenterrado hace como una semana aproximadamente.
Luego de la captura de Edwar Josué Guzmán Moreno (28), apodado “Sexo”, éste guió a los funcionarios hasta el sitio donde habían arrojado el cuerpo del catequista e incluso facilitó información de quienes más habían participado en el homicidio.
Douglas Rico informó que los restos del catequista son sometidos a los estudios de ADN para determinar científicamente que se trata del joven desaparecido en el 2019 en la Intercomunal Turmero.
Por otro lado, se comentó que al menos, a los homicidas les espera una sentencia de unos 20 años de cárcel. Hay elementos que los incriminan en la muerte de Ortega.
