Este sábado, fueron trasladados al menos 57 presos hacia otros centros carcelarios del país, luego de que organismos de seguridad controlaran el motín que se generó la noche del viernes 1 de enero, donde los reos denunciaban la falta de alimentos dentro de las instalaciones del penitenciario de Tocuyito, estado Carabobo.
Según los familiares de los privados de libertad, se confirmó que fueron llevados desde Carabobo, en autobuses de la Guardia Nacional, 29 reos a Barinas, 7 a Mérida y 21 a Táchira. Se desconoce si se ejecutarán más traslados.
El origen de dicho motín, de acuerdo a Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), la fue que los presos se molestaron 1.500 pollos llegaran recientemente al lugar, para así cubrir la comida de los presidiarios, pero aparentemente fueron revendidos en cinco millones de bolívares cada uno, mientras que el kilo de harina de maíz se revende en un millón 500 mil, por custodios y algunos presos con privilegios. Todo ello en complicidad con un grupo de reos denominados “Rancheros”, quienes son los encargados de cocinar los alimentos en el área de cocina.
Durante las protestas, los privados de libertad hicieron un llamado a la Organización de Naciones Unidas (ONU) para que atiendan la situación. “Estamos pasando hambre a diario, nos estamos muriendo de hambre”, exclamaron a través de un vídeo que fue grabado en la noche del 1 de enero.
De acuerdo a lo que dice la OVP, muchos de los internos no pudieron sumarse a la acción de protesta porque su estado de salud no les permite moverse de sus celdas.
En este sentido, esta OMG ha denunciado de forma reiterada que en el Centro de Formación del Hombre Nuevo “El Libertador” hay presos que han bajado hasta 40 kilos de peso en pocos meses por la falta de alimentos, entre otras condiciones de precariedad a las que sobreviven, exhortando a las autoridades del Estado venezolano para que atiendan esta situación.
