Se acentúan los enfrentamientos entre proturcos y kurdosirios en Ain Issa

Los enfrentamientos entre los rebeldes proturcos y la alianza liderada por kurdos Fuerzas de Siria Democrática (FSD) a las afueras de la localidad de Ain Issa, en el norte de Siria, se intensificaron el domingo y el lunes, causando al menos 15 muertos en las filas de ambos bandos.

Las FSD informaron este martes en un comunicado de que los “mercenarios” aliados de Ankara lanzaron un ataque a “gran escala” acompañado de una “intensa” presencia de drones el 27 de diciembre en las aldeas de Mushayrafa y Jahbel, lo que desencadenó choques que duraron las 48 horas siguientes.

Milicianos proturcos del Ejército Nacional Sirio (ENS), contrario al Gobierno del presidente Bachar al Asad, anunciaron hace diez días una ofensiva para tomar Ain Issa, en manos de las fuerzas kurdosirias y donde también hay una limitada presencia rusa, aliada de Damasco.

Los últimos combates a las afueras de la localidad, ubicada muy cerca pero fuera de la zona de seguridad pactada hace un año entre Ankara y Moscú en paralelo a la frontera turca, causaron cinco bajas mortales en las filas de las FSD, cuatro de ellas pertenecientes a la Brigada Democrática del Norte, según la nota.

“El Ejército de la ocupación turca y sus mercenarios han intensificado recientemente sus ataques en el eje de Ain Issa con el objetivo de controlar la carretera M4 (que une las provincias de Al Hasaka y Alepo). Los intentos de los mercenarios fallaron y nuestros efectivos los enfrentaron y repelieron”, afirmaron las FSD.

A los fallecidos de las fuerzas lideradas por kurdos se suman al menos otros diez muertos entre las facciones rebeldes proturcas, según informó ayer el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, al confirmar que se estaban produciendo “violentos” enfrentamientos entre las partes.

Según la ONG, con sede en el Reino Unido y una amplia red de colaboradores sobre el terreno, algunas informaciones apuntan a que las FSD y Moscú estarían negociando un posible acuerdo para que los kurdosirios cedan Ain Issa a las tropas leales a Al Asad para impedir así el avance de las milicias proturcas.

A finales de 2019, Turquía inició una incursión militar en Siria para tomar el control de una franja del país vecino junto a su frontera, expulsar de ella a las milicias kurdosirias, a las que considera terroristas, y devolver a un gran número de refugiados sirios a esa zona.

Semanas más tarde, Ankara y Moscú acordaron en la ciudad rusa de Sochi la creación de “una zona de seguridad” en esa franja de 30 kilómetros en el noreste de Siria, de la que Ain Issa no formaba parte, pero que se encuentra a apenas unos kilómetros de ella, al sur de Al Raqqa.

EFE