La crisis económica que enfrenta el país está transformando las tradiciones navideñas

Son muchas las tradiciones que los venezolanos tienen en la época de navidad, pero los ciudadanos aseguraron que la situación del país está cambiando las costumbres navideñas.

Pedro Mairy

Cada 31 de diciembre muchos ciudadanos acostumbran comer 12 uvas cuando se va acabar el año, pidiendo un deseo por cada uva consumida, esta tradición es una creencia que se ha mantenido durante años.

Sin embargo, la fuerte situación económica está afectando considerablemente que muchos venezolanos mantengan esa costumbre.

En este sentido, tras un recorrido realizado en el casco central de la Ciudad de Maracay, se preguntó a los maracayeros si esta tradición la realizarán este año, y si su economía le permite comprar las uvas.

María Céspedes aseguró que como venezolana en tiempos de antaño esta tradición no podía faltar la noche del 31 de diciembre, pero que a consecuencia a la crisis económica y los altos costos del racimo de uva tendrán que realizarla con otro fruto.

“Desde muy pequeña acostumbramos a comer 12 uvas pidiendo 12 deseos el 31 de diciembre, pero este año considero que será muy difícil poder adquirir las uvas para que no sólo yo continué esta tradición sino mi familia, lo más probable es que la haga con 12 mandarinas o 12 pasas, pero creo que debemos esforzarnos por no perder las costumbres navideñas de Venezuela”, comentó Céspedes.

Por su parte, Pedro Mairy afirmó que la difícil situación del país está transformando las tradiciones venezolanas, “el escandaloso aumento de las cosas ha hecho que muchos tengamos que ingeniárnosla para tratar de mantener las diferentes costumbres que tenemos en las fiestas decembrinas”.

“En muchas ocasiones hemos tenido que medir hasta donde nos alcanza lo que ganamos, para luego saber si podemos mantener las tradiciones, tal es el caso de la cena navideña, muchas familias no pueden hacerla porque simplemente no pueden comprar lo que se necesita”, destacó Mairy.

Por su parte, José Pérez también se mostró de acuerdo en tener que sustituir las costosas uvas por otro fruto, “aunque tenga que sustituirla, siempre es bueno tratar de mantener esa tradición en los últimos minutos del año”.

De igual manera, Fanny Tovar expresó que pese a la situación esas hermosas tradiciones que identifican las fiestas navideñas venezolanas no se deberían perder, “estas costumbres son muy bonitas y nos llenan de amor, reconciliación y fe a quienes la practicamos”.

“Creo que deberíamos seguir intentando no perder nuestras raíces, hacer un esfuerzo. Quizás no podamos comernos doce uvas pero si 12 pasas, mandarinas o duraznos, lo que realmente cuenta es la intención”, dijo Tovar.

Los ciudadanos afirmaron que pese a la situación en la economía del país, persistirán en mantener esas tradiciones navideñas que siempre han distinguido a los venezolanos.

JENNILET DÍAZ | elsiglo