Venta de sopas ha bajado 50 por ciento

Para muchos habitantes de la ciudad Maracay, era una costumbre que cada sábado o domingo comprar una buena sopa, sin embargo, la crítica situación que atraviesa el país se ha vuelto un factor negativo para su adquisición.

En este sentido, Blanca Liendo, vendedora de sopa, aseguró que la venta de las mismas se ha visto fuertemente afectada por la crisis económica que atraviesa el país, “tenemos 7 años en este negocio de venta de sopa, donde hemos atravesado la crisis de la pandemia y aún seguimos aquí”.

Liendo aseguró que en comparación a tiempos anteriores las ventas han bajado mínimo un 50%, “desde que empezó la pandemia todo ha bajado, duramos 2 meses y medio cerrados y después abrimos sólo para llevar, y desde hace como 2 meses es que estamos trabajando abiertamente para los clientes, pero con pocas mesas”.

La vendedora aseguró que mientras permanecieron cerrados tuvieron que generar ciertas estrategias para continuar vendiendo su producto, “teníamos clientes que se contactaban con nosotros a través de las redes sociales y así fue que pudimos lograr vender nuestro productos”.

Liendo alegó que tuvo que dolarizar el costo de las sopas, “las tenemos en 4 dólares, desde que abrimos en mayo hemos mantenido siempre ese mismo precio, el envase es el de 32 onzas, además vendemos también cachapas y carne”.

Por otro lado, Nelson Gutiérrez, vendedor de sopa, insistió en que las ventas han bajado, “la situación está tan complicada, en Mario Briceño Iragorry habían anteriormente 28 puntos donde se vendían sopa y ahora sólo quedamos dos”.

Gutiérrez tiene 15 años aproximadamente dedicándose a la venta de sopa, y que el aumento del dólar también es un factor contraproducente.

Ante esto, los vendedores destacaron su preocupación por esta situación, ya que son muchos los aspectos económicos que día a día afectan la productividad de su negocio y que de cierta forma priva a los clientes de disfrutar de la tan acostumbrada sopa dominguera.

JENNILET DÍAZ | elsiglo