Dos ciudadanos fallecieron en igual número de accidentes automovilísticos en la entidad regional, y las causas de los mismos están en proceso de investigación de parte de las autoridades de la Dirección de Tránsito Terrestre.
De acuerdo a la información conocida de manera extraoficial, el primer incidente se registró en la carretera nacional de El Consejo cruce con la calle Ricaurte del municipio José Rafael Revenga.
Se dijo que el percance ocurrió propiamente en la calle Ricaurte cruce con la carretera nacional, cuando Heriberto Guzmán Arrieta, de 56 años de edad, trató de cruzar ese tramo vial, siendo embestido por un vehículo del cual se desconocen detalles.
Aunque no hubo información de las autoridades sobre el incidente ni mucho menos de los familiares, se sospecha que el conductor se habría dado a la fuga, mientras que el herido fue trasladado en un vehículo especial hasta el Hospital Central de Maracay.
Después de los grandes esfuerzos de los médicos, el hombre dejó de existir en las últimas horas, producto de fracturas y traumatismo generalizado; su cadáver fue trasladado a la Morgue de Caña de Azúcar para la autopsia de ley.
Asimismo en la carretera nacional, entre el tramo de San Francisco de Asís y Villa de Cura del municipio Zamora falleció Douglas Cedeño, de 41 años de edad.
Del suceso no se ofrecieron detalles, pero se presume que el individuo impactó contra objeto fijo. Sin embargo, el caso está bajo averiguación de los funcionarios de Tránsito Terrestre.
Vale indicar que la cifra de muertos por accidentes automovilísticos ha disminuido considerablemente en este mes, esto en comparación con años pasados, donde las cifras eran altas.
La imprudencia, el exceso de velocidad y la falta de precaución de parte de los peatones a la hora de cruzar las vías terrestres, siguen cobrando víctimas y dejando personas lesionadas como secuelas, generando problemas psíquicos.
Quizás la merma de muertos por esta época del año se deba a la falta de combustible en las estaciones de servicios y además que el precio de la gasolina se comercializa a precios internacionales, así como la disminución de la ingesta alcohólica. Comprar una botella de licor representa gastar varios millones de bolívares. En pocas palabras la cosa no está fácil como para estar gastando dinero así de fácil.
En resumen de cuentas, las largas hileras de automóviles se observan a diario en las gasolineras que tienen precios internacionales y las subsidiadas por el Gobierno nacional, así como otros factores, según la opinión de los ciudadanos en las calles.
Hoy día, echar gasolina se ha convertido en una gran pesadilla para muchos ciudadanos, pues deben soportar horas y hasta días en una cola, exponerse a los peligros de la delincuencia, aguantar sed, hambre y muchas necesidades. No se vislumbra una salida a la problemática, y según la posición del Gobierno es por causa del bloqueo de Estados Unidos y la oposición ultraizquierdista.
LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
