El Gobierno alemán declaró este miércoles que Estados Unidos no le había informado de su decisión antes de anunciar una significativa retirada de sus tropas de Afganistán e Irak, y se mostró preocupado por la medida.
El portavoz del Ministerio de Exteriores, Christofer Burger, indicó en una rueda de prensa ordinaria que, pese a “señales previas” en este sentido, el Ejecutivo estadounidense no había comunicado a Berlín sus planes concretos.
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Burger agregó que la decisión genera “preocupación” en el Gobierno alemán porque pone en peligro el proceso de paz y lo alcanzado hasta el momento, y todo esto se le va a hacer saber al Gobierno estadounidense.
El portavoz del Ministerio de Defensa, Arne Collatz, habló por su parte de sorpresa y reconoció que, dependiendo de los efectivos que retire Washington de Afganistán, su propia misión en el norte del país podía verse afectada.
Collatz recordó, además, que el lema de los aliados de la OTAN en Afganistán era “entrar juntos, salir juntos”.
El Pentágono anunció este martes oficialmente la retirada para el 15 de enero de 2.000 soldados de Afganistán y sacar a 500 efectivos en Irak, para dejar allí a otros 2.500. La sustancial reducción de tropas ordenada por el presidente saliente, Donald Trump, se debería producir apenas cinco días antes de la toma de posesión de su sucesor, el presidente electo Joe Biden.
