La actividad económica en Brasil creció un 9,47 % durante el tercer trimestre del año, respecto al período anterior, lo que refuerza la reacción del país tras el durísimo impacto por la pandemia, informó este viernes el Banco Central.
De acuerdo con el Índice de Actividad Económica del Banco Central (IBC-Br), considerado como una medición previa del comportamiento del Producto Interno Bruto (PIB), esa mejora con relación al segundo trimestre fue reflejo de la reapertura que siguió a las cuarentenas impuestas durante los tiempos más duros de la pandemia.
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Según ese indicador, la actividad económica en septiembre creció un 1,29 % frente al mes anterior, lo cual confirmó la recuperación que se registra en forma ininterrumpida desde mayo pasado.
Aun así, entre enero y septiembre de este año el IBC-Br reflejó aún los efectos de la crisis sanitaria y acumuló una caída del 4,93 %, con una contracción interanual del 3,32 %.
De acuerdo con el Banco Central, la recuperación de las actividades económicas responde en especial al fin de las cuarentenas, así como a “programas gubernamentales” de auxilio financiero a los más pobres y a trabajadores informales adoptados frente a la pandemia, “que han permitido una retomada relativamente fuerte del consumo”.
El IBC-Br es considerado en el mercado financiero como una suerte de medición previa del PIB, cuyo resultado del tercer trimestre será divulgado el próximo 3 de diciembre por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (Ibge).
El PIB brasileño llegó a caer un 9,7 % en el segundo trimestre del año frente al primero por el impacto del coronavirus, y las proyecciones de algunos organismos internacionales llegaron a prever una contracción de hasta el 10 % para este 2020.
Sin embargo, esas previsiones han sido revisadas paulatinamente y ahora tanto el Gobierno como el mercado financiero calculan que, si bien la economía brasileña se derrumbará este año, la caída será sustancialmente menor a lo calculado inicialmente y se situará en torno al 4,8 %.
