Piden a Corte Interamericana jurisprudencia para proteger a las mujeres trans

La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) comenzó este miércoles una audiencia por el caso de la supuesta ejecución extrajudicial de la mujer trans hondureña Vicky Hernández, crimen que según los demandantes evidencia un contexto de violencia hacia la comunidad LGBT en Honduras y la necesidad de jurisprudencia internacional para la protección de esa población.

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“La Corte podrá pronunciarse por primera vez sobre la responsabilidad estatal por la muerte de una mujer trans y desarrollar jurisprudencia en materia de violencia contra las personas LGBT (lesbianas, gay, bisexual y trans) con énfasis en mujeres trans, teniendo en cuenta el contexto”, declaró en la audiencia el presidente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Joel Hernández.

La CIDH, que se encarga de elevar los casos a la CorteIDH, afirma que la muerte de Vicky Hernández se produjo como resultado de “la violencia por prejuicio por su identidad de género” y que es un crimen atribuible al Estado por la violación a los derechos a la vida, la honra, la dignidad, la libertad de expresión, al principio de igualdad y de no discriminación, entre otros.

UN CONTEXTO DE VIOLENCIA

Vicky Hernández, quien era activista de la organización defensora de los derechos de la comunidad trans Unidad Color Rosa, fue asesinada de un disparo en la cabeza entre la noche del 28 de junio de 2009 y la madrugada del día siguiente, en la ciudad de San Pedro Sula, en el marco de un toque de queda decretado durante un golpe de Estado.

El presidente de la CIDH dijo en la audiencia que existen “fuertes indicios de la participación estatal en los hechos”, y que tras más de una década no ha habido una investigación diligente y el caso sigue en la impunidad.

Según Hernández, esto forma parte de un contexto de impunidad y de violencia contra la población LGBT, que se incrementó luego del golpe de Estado del 2009.

El perito presentado por la CIDH, Carlos Zelada, afirmó que ese contexto de violencia contra personas LGBT afecta particularmente a las mujeres trans por razones de su identidad de género.

Zelada detalló datos recopilados por organismos de Naciones Unidas, la CIDH y organizaciones no gubernamentales hondureñas, que determinan que entre 1994 y 2019 han sido asesinadas al menos 350 personas LGBT en Honduras.

Según el experto, entre 1994 y 2008 hay registro de 20 asesinatos de personas LGBT, y a partir del golpe de Estado los números crecieron.

En el escenario del golpe de Estado, en siete meses se contabilizaron 29 de esos crímenes, de los cuales 15 correspondieron a personas trans, detalló Zelada.

En total, 10 de esas víctimas estaban relacionadas con la organización Unidad Color Rosa, de la que formaba parte Vicky Hernández, según el perito.

“En ningún caso hay avances significativos en la investigación”, aseveró Zelada.

DERECHO A NO SUFRIR VIOLENCIA

En la audiencia ante la Corte Interamericana también participó la mujer trans Claudia Spellman, una hondureña asilada en Estados Unidos y que trabajó con Vicky Hernández en la organización Unidad Color Rosa.

Spellman, quien declaró en calidad de testigo, recordó que Vicky Hernández fue “una activista defensora de los derechos humanos y portavoz de nuestra comunidad, que tenía misiones por cumplir en su vida”.

“Siempre ha sido una tarea bien difícil para la organización y para nosotras como personas desarrollar actividades porque la violencia y la discriminación han sido comunes en nuestras vidas”, afirmó.

Spellman relató que dos chicas acompañaban en la calle a Hernández la noche del crimen y que al ver a la policía hicieron lo que acostumbraban: huir separadamente para no ser detenidas. Al día siguiente se enteraron de que su amiga había sido asesinada.

En su declaración, Spellman relató que la policía en Honduras suele detener a las mujeres trans, las someten a tratos crueles, las golpean, les quitan el dinero, hay violencia física, sexual y psicológica, y hasta ocurren asesinatos.

Spellman dijo a los jueces de la Corte Interamericana que al cuerpo de Hernández no se le practicó una autopsia y que la denuncia interpuesta no recibió mayor atención en la Fiscalía.

La mujer trans aseguró que en Honduras es urgente una ley de identidad de género para que los miembros de la comunidad trans puedan gozar de los mismos derechos que cualquier otra persona y sean protegidos contra la violencia.

La audiencia ante la Corte Interamericana concluirá el jueves con los alegatos finales del Estado, de la CIDH y de la representación de la víctima.

Tras concluida la audiencia las partes tendrán un mes para presentar sus alegatos finales por escrito y a partir de entonces los jueces podrán deliberar y emitir una sentencia en cualquier momento.

EFE