Amanecieron sin gasolina las estaciones de Maracay

Los maracayeros iniciaron la semana de radicalización en las colas de las estaciones de servicio, en medio de la inquietud que genera el fin del lapso de abastecimiento informado en días recientes por el presidente Nicolás Maduro.

Largas colas para echar gasolina subsidiada

Algunos usuarios indicaron que llegaron a la cola la noche del domingo, mientras que otros llegaron en la madrugada del lunes, sin embargo, la gandola con gasolina no había llegado en horas del mediodía de ayer, lo que podría dejarlos sin esperanza de llenar sus tanques.

Milca Romero indicó que llegó a la cola el día domingo y que seguía a la expectativa de saber si iba a poder abastecer su vehículo. “Todos llegamos aquí con la esperanza de obtener la gasolina, estamos en la dulce espera de la gandola, aún no sabemos si correremos con la suerte de echar”.

Leer más: Aragueños listos para arrancar la semana radical

Romero recalcó que llenar el tanque de su vehículo a precio internacional es casi imposible para la cantidad de dinero que devenga; “son muchos gastos para invertir al menos 20 dólares semanales”.

Por su parte, William Jiménez puntualizó que “es imposible que los venezolanos ganando sueldo mínimo podamos invertir en gasolina a precio internacional. Entonces tratamos de llegar temprano a la cola y cuando lo logramos, vienen los amigos que ya están cuadrados con los guardias y meten todos sus carros adelante, es decir que la mafia con el combustible sigue”.

Mientras que Arturo Jaime señaló, “cuando hay combustible la cola rueda rápido aquí en la estación de servicio Royal de la Av. Constitución, pero lamentablemente para mi hoy lunes que me toca son las 10:30 de la mañana y la gandola no llega, situación que nos preocupa sobre todo a los que trabajamos con nuestros vehículos”.

Javier Leal expresó, “echar gasolina subsidiada es como sacarse la lotería, pues nunca se sabe cuando llega y si llega va alcanzar para todos los que estamos en la cola. Llegué a las 5:00 de la madrugada, pero la cola ya está larga y la estación de servicio cerrada porque no hay combustible, confío en Dios que antes de las 12:00 del mediodía llegará”.

Por último, Wilmer Camero dijo, “llegué a la cola de gasolina para probar suerte, pues cada vez que vengo o no ha llegado la gandola o simplemente no alcanza hasta mi carro. Parece que correré con la misma suerte porque la gandola de combustible brilla por su ausencia”.

IRIOS MÉNDEZ | el siglo
fotos | JOEL ZAPATA