Los conductores de las cisternas de agua para el consumo humano aseguran que la falla en la distribución de gasolina se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza, ya que sin suficiente combustible es casi imposible trabajar.
Cisternas pasan las de Caín para suministrar agua
Los cisterneros manifestaron que la escasez de combustible les impide poder suministrar agua a las comunidades. “Estamos sin gasolina desde el lunes pasado, dejé de trabajar el día viernes porque no tengo como hacer los traslados”, declaró Luis Hernández.
Señaló que la falta de gasolina ha hecho que el costo de 8.000 litros de agua, que es la capacidad de un tanque de un camión cisterna, se incremente entre 15 a 20 dólares. Otro de los responsables de abastecer de agua a distintos sectores de la ciudad y quien prefirió resguardar su identidad, afirmó que la gasolina está siendo revendida a un dólar por litro y manifestó que evalúa la posibilidad de adquirirla a ese precio, pues necesita trabajar nuevamente para llevar el sustento a su hogar.
Por su parte, Eduardo Rodríguez nos dijo, “lo que aumenta realmente es el flete, porque el agua es gratis, pero trasladarse a una comunidad requiere de combustible, el cual estamos pagando a precio de mercado negro 120 litros sólo rinde para una semana de trabajo”.
Yorman Betancourt comentó, “nosotros prestamos un servicio público vital, como lo es el suministro de agua potable y además el problema de la pandemia que las personas deben quedarse en casa para cuidar la salud. Muchas veces he tenido que hacer colas de 3 semanas que sólo me alcanza para tres días, dependiendo del lugar donde vaya a trasladar el agua”.
Por último, los choferes de las cisternas esperan que el suministro de combustible pueda ser garantizado a quienes prestan el servicio de agua, uno de los elementos indispensables para prevenir la propagación del Covid-19.
IRIOS MÉNDEZ | elsiglo
