Los comerciantes mostraron ayer una buena cara, pues pretenden sacarle el jugo a la semana de flexibilización amplia y dejar atrás la nefasta senada de radicalización.
Carlos Araujo, comerciante de Turmero, comentó que, sin importar que sea semana de flexibilización o no, la gente sale a comprar, sobre todo para economizar, especialmente los días en que el dólar está menos caro.
“La compra de alimentos es fundamental para la subsistencia de las personas y la situación económica por la que está pasando el país hay que aprovechar cuando haya dinero en el bolsillo. Nosotros los comerciantes tratamos de ofrecer los mejores precios, pero la situación también nos arropa a todos”.
Por su parte, Marina Alarcón dijo: “No queda más opción que salir a comprar en cualquier día de la semana, pues depende de la disponibilidad de nuestro bolsillo. Lo importante es que usemos guantes y tapabocas a la hora de salir a la calle, además exigir en los establecimientos comerciales gel a base de alcohol y que los empleados también tengan guantes y trapos para cuidarnos todos”.
“A PEDAL Y BOMBA”
La colectividad del eje Este está relativamente alegre con la entrada de la “semana flexible”, especialmente luego de haber pasado trabajo con el transporte durante el fin de semana.
“Vengo de Las Tejerías y he podido pasar hasta San Mateo, ya que vine a visitar a mi mamá y a traerle unos alimentos. No he visto policía por ninguno de los lugares que he pasado”, comentó Guillermo Salcedo.
“Mira salir un fin de semana es lo más engorroso que pueda existir en el eje Este, no importa el municipio, aunque Ribas lleva la batuta, porque no sólo debes esperar hasta 40 minutos por un bus, sino que de paso te maltratan y no cumplen sus rutas. Yo opté por caminar, es más tedioso pero sé que no tengo que esperar, porque todo depende de mí”, puntualizó la señora Mireya Balbuena.
DANIEL MELLADO | IRIOS MÉNDEZ | el siglo
fotos| JOEL ZAPATA
