La tecnológica china Lenovo elevó un beneficio neto en un 31 % interanual hasta los 213 millones de dólares 180 millones de euros durante el primer trimestre de su año fiscal, que finalizó el pasado 30 de junio.
En la cuenta de resultados que remitió a la Bolsa de Hong Kong, donde cotiza, Lenovo presume de su “fuerza a la hora de capear las incertidumbres del mercado”.
Según el consejero delegado del grupo, Yang Yuanqing, este “excepcional rendimiento” demuestra que la tecnológica china “ha recuperado rápidamente la inercia” tras el impacto de la pandemia del COVID-19, que ha traído “múltiples retos para todo el sector”, por lo que Lenovo ha apostado por un enfoque que denomina “abastecimiento global, suministro local”.
La facturación del mayor fabricante mundial de ordenadores avanzó un 7 % interanual hasta los 13.348 millones de dólares 11.266 millones de euros en este primer trimestre.
El desglose por sectores, denominado Grupo de Dispositivos Inteligentes que aún los negocios de ordenadores móviles supone el 80 % de los ingresos de Lenovo ingresó un 5,2 % más que en el primer trimestre del año fiscal anterior gracias a que la demanda aumentó por la necesidad de trabajar desde casa por la pandemia y a un aumento de las ventas de productos ‘gaming’.
Precisamente, Yang destacó las “nuevas oportunidades que han surgido del trabajo en remoto, la educación a distancia y la aceleración de la digitalización”.
En el sector móviles la china es propietaria de Motorola desde 2014 Lenovo registró un descenso en la facturación de un 27 %, que atribuyen a una caída de la demanda en los mercados latinoamericanos, lo que provocó unas pérdidas brutas en esta división de unos 50 millones de dólares 42 millones de euros.
Por último, el negocio de centros de datos, que ya supone el 12 % de los ingresos del grupo, fue el que más creció al disparar su facturación un 18,9 %, algo que no impidió que todavía registre pérdidas brutas de unos 58 millones de dólares 49 millones de euros.
En términos geográficos Lenovo está presente en más de 180 mercados, las ventas en el continente americano descendieron un 9,1%, mientras que en China se ingresó un 16,6 % más y en la región EMEA (Europa, Oriente Medio y África), un 28,3 %.
EFE
