Filtraciones dañan las calles de Ocumarito

Los habitantes de la calle Arismendi de la comunidad Ocumarito de Palo Negro, municipio Libertador, piden a las autoridades competente solución para el bote de aguas blancas que tienen más de tres años en su sector, lo que ha traído como consecuencia el deterioro de la capa asfáltica.

Ocumarito
Desbordamiento de aguas blancas en Ocumarito

Al respecto, Juan Torrealba indicó que la situación se complicó con la llegada de las lluvias, pues las alcantarillas colapsaron y se unieron las aguas de lluvias con el bote de aguas blancas. “Esto es un verdadero caos, pues la cosa se complica porque por más relleno que los vecinos echemos allí, la solución es repararlo de manera definitiva para evitar que todos los años tengamos la misma problemática”.

Mencionó que además del desbordamiento de agua, está el problema del alumbrado público. “Algunos postes prende de día y en la noche se mantienen apagados, son como 8 postes a lo largo de la calle y solo 3 bombillos sirven de noche. Colocaron los bombillos pero se queman muy rápido y los que no se queman sencillamente no prenden y como estas cosas, da miedo salir de su casa si se le presenta una emergencia con tanta oscuridad”, dijo Torrealba.

Por su parte, Yaneth Rodríguez comentó: “Para mí el problema radica en que el sumidero es muy pequeño para la cantidad de agua que cae cuando llueve, entonces colapsa el agua, no fluye como debería, y comienzan a desbordarse, llenándose toda la calle de agua. “Gracias a Dios en mi casa no se llena de agua por los inodoros y muchas familias han sufrido de enfermedades en la piel y respiratorias a consecuencia del agua contaminada. Esta problemática tiene más de 2 años”.

Rodríguez señaló que en reiteradas oportunidades los vecinos se han organizado y rellenan el hueco con escombros, pero con el pasar del tiempo el hueco se vuelve abrir. “Insistimos que la solución es arreglar el bote de agua y los sumideros de agua de lluvia, para poder vivir en tranquilidad sobre todo cuando llega el invierno”, aseveró la vecina.

Finalmente, Saúl Ascanio pidió a las autoridades municipales ayuda para las más de 60 familias que viven en ese sector, a quienes les urge acabar con el bote de agua y evitar la proliferación de zancudos que pueden desencadenar enfermedades, y contar con calles bonitas.

IRIOS MÉNDEZ | el siglo
fotos | JOEL ZAPATA