Douglas Rico, director del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalistica (Cicpc), informó que luego de 15 días del homicidio del artista plástico Antonio Otazzo, también conocido como el Dalí de América, el caso fue resuelto, dando un saldo de dos personas privadas de libertad y un tercer implicado en el asesinato se encuentra en fuga.
Detalló que según las investigaciones, la mañana de ese 16 de julio, Otazzo había conocido a una joven la cual se encontraba en un estado deplorable y quién le solicitó ayuda y un poco de alimento, y siendo el artista una persona amable, carismática y con voluntad para ayudar al prójimo, no se negó y le indicó a la joven que pasará por su vivienda luego a retirar algo de comida.
Horas más tarde la joven se presentó en la vivienda, ubicada en cagua, acompañada de su pareja, alias “El Fitcher”, además de otro hombre, quienes se aprovecharon de la bondad de Otazzo e ingresaron a la casa con intención de robar sus pertenencias de valor.
El funcionario policial detalló que el artista plástico era una persona de 90 años de edad, razón por la cual no ofreció ningún tipo de resistencia, por lo que los delincuentes procedieron a amordazarlo, ataron sus pies y manos para así poder proceder a sustraer sus bienes.
Asimismo, el director del Cicpc aclaró la causa de muerte del artista, ya que al momento que se dio a conocer la trágica noticia hubo mucha confusión en cuanto al móvil del crimen, y algunas personas indicaron que había sido asesinado a puñaladas, pero la realidad es que la causa de la muerte de Otazzo fue una asfixia, esto producto de su avanzada edad.
Rico informó además que del caso lograron la detención de dos personas, una de ellas la mujer que Otazzo pretendía ayudar, Francis Nathali García Vivas, de 19 años de edad, y Jhonny José Fitcher, de 26 años de edad.
Destacó, que existe una tercera implicada en el asesinato que actualmente se encuentra en fuga, la cual está identificada como Ángel de Jesús Fuenmayor, sin embargo, está persona no aparece en el registro de cedulación ni telefónicos, por lo cual no está identificado plenamente, pero se presume que posea una identidad falsa.
Ante esto, el funcionario solicitó el apoyo de los ciudadanos para así poder dar con el paradero y la captura de este delincuente que le segó la vida al Dalí de América.
LOS HECHOS
Antonio Otazzo era una persona que a pesar de su avanzada edad todavía estaba lucido y le gustaba compartir con sus amigos, por eso ya era una costumbre que cada tarde algún conocido fuera a su casa a disfrutar un momento con el artista.
Ese viernes, un compañero del Dalí de América se acercó a la vivienda con la finalidad de compartir una taza de café, sin embargo, al llegar se dio cuenta que algo extraño estaba sucediendo.
Luego de llamarlo varias veces y tocar la puerta de la vivienda, el amigo de Otazzo al ingresar a la misma y percatarse si ocurría algo extraño en la casa, pero al llegar a la segunda puerta fue recibido por una mujer que dijo ser la sobrina del maestro.
Sin embargo, el visitante no dejaba de pensar que algo extraño pasaba y decidió ir hasta la casa de la hija de Otazzo y comentarle lo sucedido.
Una vez que le notificó a la hija, decidieron dirigirse a la vivienda y al llegar a la misma notaron la presencia de un sujeto que era totalmente desconocido para ellos, por lo que asustados corrieron hasta de la sede del Cicpc a buscar ayuda.
De forma inmediata, las comisiones al llegar lograron la detención de Francis Nathali García
Vivas, pero los dos hombres huyeron del sitio, por lo que los detectives iniciaron una búsqueda para dar con sus paraderos.
Pero para lo que no estaba preparada la familia del Dalí de América y los funcionarios policiales, era encontrase con el cuerpo sin vida del maestro en el piso de una de las habitaciones.
Ante la escena tan atroz los funcionarios del Cicpc iniciaron una investigación y destacaron que no van a descansar hasta que los tres implicados en la muerte de Antonio Otazzo estén tras las rejas.
