El joven que aparentemente cayó neutralizado en un enfrentamiento con funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas a eso de las 3:30 de la madrugada del miércoles pasado, prestaba servicio militar en el Batallón Dos mil, situado en la población de Rubio en Táchira, informaron familiares a los periodistas de elsiglo.
Se llamaba Oliver Sulliván Tovar Ojeda, de 25 años de edad, quien ostentaba el rango de soldado raso y actualmente estaba de permiso en su residencia, situada en el sector La Concepción del municipio José Rafael Revenga del estado Aragua.
Allí estaba conviviendo con su pareja, y desde hacía unos 20 días se instaló en esa propiedad, la cual se encontraba en proceso de trámite de compra. El inmueble sería adquirido por un monto de seiscientos dólares, afirmaron los denunciantes.
Sin embargo, lo acusaron de robarse esa edificación cuando es totalmente falso, dijeron los denunciantes. Los dueños fácilmente pudieron acercarse a un comando policial o en su defecto al despacho del Cicpc a consignar una denuncia sobre el respecto.
Y producto de esa denuncia, los funcionarios se acercaron en la madrugada del miércoles y a eso de las 3:30 de la madrugada, lo mataron a tiros. “Nosotros presumimos que allí no hubo enfrentamiento sino que cuadraron todo para simular un hecho de tal naturaleza”, dijo.
“Aliñaron” la escena del suceso sembrándole un arma de fuego, lo cual es totalmente falso. Nuestro familiar sólo manipuló un arma de fuego allá en el Batallón Dos mil”, agregaron. También – dijeron- lo vincularon con ser miembro activo de una banda de delincuentes en El Consejo. Se trató de un teatro más, expresaron los familiares.
Al final del mediodía de este lunes, los parientes recibieron un informe policial que el reservista habría muerto a causa de una resistencia a la autoridad y porte ilícito de arma de fuego.
LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
