De México a Argentina, sin escalas ni rivalidades, deportistas, clubes y figuras del ayer han formado una liga de la solidaridad para ayudar a paliar, de un lado, necesidades de los más castigados por la pandemia y, del otro, a dotar de recursos a los equipos de salud que luchan contra el virus.
Todo cuenta en esta cruzada: desde dinero, torneos virtuales para recaudar fondos, donación de alimentos y equipos de protección o la entrega de prendas o implementos, previamente firmados, para ser llevados a subastas.
Su empleo es futbolista, se desempeña como delantero del Aurora boliviano, pero en tiempos de pandemia una bicicleta usa Gabriel Ríos en su recorrido por barrios pobres de Santa Cruz para regalar el pan recién horneado hecho por su abuela y una tía.
Contra la pandemia no vale ser célebre o millonario para ayudar.
«Es el momento de salir a defender a los que tanto los alentaron», manifestó la semana pasada el portero panameño de fútbol Jaime Penedo al resumir el sentimiento que ha movido a un grupo de futbolistas que hicieron historia en la selección panameña.
En México los futbolistas aceptaron una rebaja de salario para ayudar a colegas en situaciones más vulnerables: los equipos femeninos y de divisiones inferiores, además de trabajadores de las entidades profesionales.
Equipos como Toluca, Cruz Azul, Tigres UANL, León y América destinaron recursos para apoyar a la población y a pequeños empresarios afectados por la para de las actividades productivas.
El 1 de mayo se rifó un guante firmado por las leyendas del boxeo Julio César Chávez y Jorge ‘el Travieso’ Arce y los recursos se destinaron a la lucha contra la COVID 19 en el estado de Sonora.
El portero del PSG francés Keylor Navas ha enfocado sus esfuerzos para ayudar a unas 450 familias costarricenses pobres y afectadas, a través de su fundación Tiempos de Esperanza.
Los futbolistas Bryan Ruiz y Celso Borges también han mostrado su apoyo a una campaña gubernamental para que la gente done dinero y se compren víveres a familias en pobreza.
Además de Penedo, Felipe Baloy, Blas Pérez y Luis Tejada, rostros visibles de la campaña ‘Héroes de barrios’, que llevan comida a barrios humildes, el delantero Rolando Blackburn, del The Strongest boliviano, ha enfocado sus ayudas a enfermeras y médicos.
El exbeisbolista y miembro del Salón de la Fama Mariano Rivera ha organizado el envío de víveres a los habitantes de Puerto Caimito, donde se crió.
Los peloteros de Grandes Ligas Johan Camargo, Edmundo Sosa, Jaime Barría, Ariel Jurado y Christian Bethancourt también contribuyeron con la entrega de alimentos en sus respectivas provincias.
A los 68 años, el expúgil Roberto ‘Manos de Piedra’ Durán promueve campañas para concienciar a la gente sobre el riesgo del contagio y ha ofrecido un par de guantes para ser subastados.
«Recuerden que para darle un K.O. al #coronavirus tenemos que pelearle a la distancia. Les dejo este video de tarea y quédate en casa, lávate las manos y mantén tu distancia. Se les quiere», ha escrito el exmúltiple campeón.
Figuras del deporte cubano se han unido en una campaña contra la propagación del virus con la consigna «La medalla más importante es la salud».
La conforman la campeona mundial de lanzamiento del disco Denia Caballero, la velocista discapacitada Omara Durand, el saltador de longitud Juan Miguel Echevarría, la ciclista Arlenis Sierra, el pelotero Frank Camilo Morejón, la tiradora Eglys de la Cruz, el boxeador Lázaro Álvarez Estrada y el acumulador de varios récords Guinnes en dominio del balón, Erick Hernández.
Carlos Correa, campocorto de los Astros de Houston, donó la semana pasada a través de su fundación 3 millones de dólares en equipos para auxiliar a varias instituciones sanitarias de Puerto Rico.
Javier Báez, de los Cachorros de Chicago, y José Berríos, de los Mellizos de Minesota, donaron el 2 de mayo alimentos y mercados a familias carentes en Puerto Rico, cuya condición se ha agravado por la expansión de la COVID-19.
El pívot dominicano de los Sixers Al Horford donó 500.000 dólares para repartirlos en los lugares donde ha jugado: Michigan, la Florida, Atlanta, Boston, Filadelfia y su país.
El pívot de los Timberwolves Karl-Anthony Towns, de ascendencia dominicana, donó 100.000 dólares para la Clínica Mayo semanas antes de que su madre falleciera a causa del coronavirus.
El segunda base de los Mets de Nueva York Robinson Canó ha distribuido raciones alimenticias en sectores pobres de su natal San Pedro de Macorís.
A través de dos fundaciones Radamel Falcao García asumió el pago de 300 alquileres de vivienda y la distribución de 400 bolsas de mercado, así como la donación de 1.400 más.
El punta Alfredo Morelos anunció el desembolso de 75.000 libras esterlinas para ayudar a familias vulnerables en Colombia durante la pandemia y antes ya había donado 300.000 libras a través de su fundación para ayudar a la población más carente en su natal Cereté.
El central Yerry Mina también canalizó a través de su fundación la entrega de mercados y productos de aseo a los habitantes de Guachené, donde nació hace 25 años.
El referente de la selección ecuatoriana Antonio Valencia entregó recientemente 20.000 trajes biodegradables, 10.000 mascarillas, así como miles de guantes y protectores.
Ayudas similares también enviaron Jaime Ayoví desde Argentina, Jefferson Montero desde Inglaterra y Enner Valencia de México.
En Bolivia el fútbol es el deporte que más gestos solidarios ha emitido durante la pandemia.
The Strongest, Always Ready, Blooming y Oriente Petrolero han recogido y distribuido alimentos y cedido sus instalaciones para transformarlas en hospitales temporales, al ejemplo de lo que ya ha ocurrido en Brasil y Uruguay.
El futbolista Adrián Jusino ha salido por sus propios medios a repartir comida. Entrenadores y directivos se han sumado a la cruzada humanitaria, que también incluye la atención a refugios de animales.
El tenista Hugo Dellien, a través de la campaña “Una sola familia”, recauda fondos para ayudar a personal sanitario, en tanto que el piloto de motos y autos Sebastián Careaga se concentra en la distribución de alimentos.
La Federación Peruana de Fútbol (FPF) prestó el autobús de la selección para trasladar al personal sanitario que atiende a pacientes de COVID-19 y también donó a las fuerzas armadas más de 15.000 mascarillas blancas con la distintiva franja roja que luce en su camiseta el combinado nacional.
Alianza Lima donó sangre a través de sus futbolistas y jugadoras de voleibol, ejemplo que luego siguieron Universitario con sus jugadores de fútbol y otros empleados, y también el UTC de Cajamarca. Asimismo, Melgar entregó un lote de bebidas hidratantes a la Policía.
En Brasil, uno de los gestos colectivos vino de la selección de fútbol bajo la consigna ‘Seleçao Solidaria’. El 21 de abril se recaudó el equivalente a cerca de un millón de dólares para entregar canastas básicas de provisiones a unas 32.000 familias necesitadas durante dos meses.
El capitán Dani Alves, Neymar, el portero Alisson y otras estrellas del fútbol brasileño han donado camisetas autografiadas para subastas.
Neymar y Marta, la principal jugadora de la selección femenina, también participaron en la reciente campaña internacional contra el coronavirus promovida por la ONU.
En Paraguay el entrenador argentino Gustavo Costas promovió hace dos semanas, con ayuda de su club, el Guaraní, la creación de una olla popular que alimentó a centenas de pobres. A la par se distribuyeron productos básicos en barrios pobres de la periferia capitalina.
El Cerro Porteño programó la semana pasada un evento virtual de donaciones que reunió a 50.000 participantes.
Jugadores del Nacional y Peñarol, y el grupo de las figuras que son habituales en las convocatorias de la selección uruguaya han donado cestas con alimentos.
Al menos tres baloncestistas, Esteban Batista, único uruguayo que jugó en la NBA; Jayson Granger y Bruno Fitipaldo; el piloto Santiago Urrutia; el peleador de artes marciales mixtas Gastón Reyno y los tenistas Pablo y Martín Cuevas se han sumado a campañas benéficas.
Los futbolistas chilenos Arturo Vidal y Gary Medel anunciaron el 30 de marzo el lanzamiento de una campaña de donaciones #TodosConLaCamiseta para recaudar recursos destinados a la Cruz Roja chilena.
Las mismas figuras han ofrecido para sendas subastas las camisetas que guardan de la Roja y en otros clubes en los que han jugado. El ejemplo también lo ha seguido el tenista Christian Garín al entregar la raqueta con la que ganó este año el ATP de Río de Janeiro.
El delantero argentino del Juventus Paulo Dybala y su compatriota Diego Schwartzman, número 13 del tenis mundial, organizaron un torneo de fútbol virtual con varios deportistas y artistas para recaudar fondos para la lucha contra el coronavirus.
Se sumaron Sergio Agüero, Leandro Paredes y Eduardo Salvio, el baloncestista Facundo Campazzo y el extenista Juan ‘Pico’ Mónaco.
Lionel Messi hizo donaciones a hospitales de Barcelona y Argentina y aceptó una rebaja salarial del 70% para que su club pueda pagar los sueldos de otros trabajadores.
Ezequiel Lavezzi, exjugador del Paris Saint Germain, el Nápoles y San Lorenzo donó unos 75.000 dólares que permitieron comprar 7.500 bolsones de comida que fueron distribuidos a las familias de su ciudad natal, Villa Gobernador Gálvez, de la provincia de Santa Fe.
Lautaro Martínez, del Inter, donó 3.350 litros de alcohol en gel, 100.000 guantes de látex, 5.000 camisolines y 5.000 cofias a hospitales de su natal Bahía Blanca, provincia de Buenos Aires.
EFE