Las gripes y resfriados comunes se pueden mejorar sin efectos secundarios. Una dieta rica en vegetales crudos refuerza el sistema inmunitario y previene catarros y gripes. En particular, estos alimentos constituyen el mejor talismán contra los agentes patógenos.
1) Ajo: el remedio tradicional
El zinc del ajo combate los virus y otras sustancias activas aumentan la producción corporal de interferón.
Toma 1-2 dientes crudos en la ensalada o con pan y aceite.
2)Jengibre: previene y alivia
El jengibre reduce la fiebre, la congestión nasal y las molestias musculares asociadas a la gripe. Haz la infusión con 10 g de la raíz fresca, en rodajas sin piel, durante 8 minutos.
3)Limones: multiplican la eficacia defensiva
Las flavononas del limón multiplican por 200 la actividad de la vitamina C e incrementan el número de células defensivas. Añade un chorrito al té verde o a la infusión de jengibre.
4)Té verde: antioxidante y antivírico
Entre otros principios activos del té verde está la teoflavina con efecto antivírico. Bebe un mínimo de 3 tazas diarias (sin azúcar ni leche).