El vuelo de los Cardenales de San Luis es una incertidumbre esta temporada luego de las bajas de Marcell Ozuna, José Martínez y Michael Wacha, sin embargo en los últimos años se han caracterizado en dar batalla en la división Central del viejo circuito sin grandes nombres.
Gran parte del peso parece recaer en los hombros del nueve veces All-Star, Yadier Molina, quien vuelve a ser el principal carta dentro de las aspiraciones en San Luis. Si bien es cierto en los últimos años el careta ha estado alejado de su mejor versión ofensiva, aunque deberá hacer los ajustes esta zafra rápidamente para acompañar a los bombarderos Paul Goldschmidt y Paul DeJong quienes han dado muestras de su poder al combinarse para 64 jonrones en el 2019.
Por otro lado, el éxito de esta campaña parece no escribirse de la mano ofensiva, sino más bien de lo que pueda hacer su arsenal de pitcheo que poco a poco se ha ido fortaleciendo para ser hoy en día uno de los mejores de la Nacional. La rotación ha incorporado un trío de jóvenes que en sus primeros años han demostrado talento suficiente para comandar y llevar a lo más alto del podio a los Cardenales.
Jack Flaherty, es la cara de la rotación luego del flamante año 2019 donde registró uno de las mejores efectividades de las Grandes Ligas (2.75) para así cerrar la zafra con 11 victorias un nuevo récord personal. No obstante, esos números reflejan algo de su talento aunque aun así está lejos de su mejor versión es por ello que esta campaña se espera un mayor protagonismo por parte del diestro de 24 años.
Asimismo, Dakota Hudson es otro de los brazos claves al cosechar 16 victorias en su segundo año, récord personal. Mientras que Mikolas y Wainwright están listos para batallar.
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