Ronald Acuña Jr. se reportó con guante y bate en mano a los entrenamientos de los Bravos de Atlanta para comenzar a preparar un tercer capítulo dorado en las mayores. El jardinero va en busca de superar los números de años anteriores, o al menos eso hizo entender a su compañero de Ozzie Albies.
“Es mi buen amigo, siempre habla de cómo va a mejorar día a día. Lo primero que me dijo al llegar es que va por 50HR-50BR esta temporada”, aseguró el camarero de los Bravos, quien se ha convertido en uno de los mejores aliados del criollo desde su llegada a las Grandes Ligas.
El guardabosque venezolano llego con la vara alta al spring training aunque con todo el talento que ha demostrado en sus primeras dos temporadas parece que lo único que lo separada de alcanzar esos registros es mantenerse saludable.
En su primera zafra se quedó con el Novato del Año, mientras que el año pasado logró su primer Bate de Plata además de asistir al Juego de las Estrellas.
Acuña Jr. fue uno de los primeros jugadores de posición en reportarse con el equipo y esto engrandece aún más su compromiso con la organización de los Bravos, que ya ha ido dando muestras que tienen suficientes armas para luchar por un lugar en la postemporada.
La madurez que ha ido demostrando el bigleaguer ha sido digna de admirar, a pesar de ser uno de los jugadores más introvertidos en el big show también da señales de ser uno de los más comprometidos en seguir progresando parar llevar lo más lejos posible a los Bravos. El criollo comenzó a engranar las piezas de la maquinaria ofensiva en la caja de bateo para encaminar lo que será un nuevo año productivo.
En 1202 apariciones al plato el venezolano ha cosechado 165 carreras remolcadas, 205 anotadas, 67 cuadrangulares y .285 de promedio al bate; aunque sigue con ansias de seguir agrandando su historia dentro de la ciudad de Atlanta.
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