El expresidente de Colombia, Juan Manuel Santos, en una entrevista, se confesó luego de dejar el poder político de Colombia el cual dirigió por ocho años. El exmandatario confesó en retrospectiva, que le hubiese encantado poder hacer muchas más cosas por su país y admitió varias de sus fallas.
“Cualquier mandatario cuando mira con humildad hacía atrás debe decir faltó mucho por hacer”, dijo.
Se refirió al tema de la absolución de cargos a muchos exguerrilleros durante su gobierno y lo duro que fue explicarle a las personas victimas de sus atrocidades lo importante de llevar un acuerdo de paz.
“Yo pensé que en el proceso de paz iban hacer las más difíciles de converse de una justicia transicional. Hablé con ellos y me decían sigan adelante”, añadió.
El expresidente quiso insistir en que se regule el trafico de drogas y que no se siga dando más prohibición del uso de drogas en su país.
En el caso de Venezuela, Santos manifestó que Venezuela es parecido a un avión que se queda sin gasolina, y que debe encontrar una pronta solución para resolver sus los problemas de sus habitantes.
“Venezuela es como una especie de avión que se queda sin gasolina, o tiene un aterrizaje suave. A todos nos conviene un aterrizaje suave, el gobierno hay que construirle un puente de oro con salida digna, porque a Colombia lo que menos le conviene es una implosión”, dijo.
Manifestó que en el país debe regresar el diálogo, basado en la diplomacia universal.
