Fijar metas
La gente mentalmente fuerte no se desliza pasivamente por la vida. Ya sea que quieran aprender un nuevo idioma o ponerse una meta para estar en forma, constantemente se desafían a sí mismos para aprender cosas nuevas y alcanzar mayores logros.
Desafiarse a sí mismos para alcanzar nuevas metas les da muchas oportunidades para perfeccionar sus habilidades.
Aunque no triunfen, son capaces de aprender del proceso.
Estar agradecidos
En vez de pensar que merecen algo mejor, las personas mentalmente fuertes admiten que tienen más de lo que merecen.
Están agradecidos por todo, desde el agua limpia que beben hasta los amigos que son compasivos con ellos.
Su agradecimiento les ayuda a sentirse y a hacer lo mejor que pueden.
Mimarse a sí mismos
Algunas personas creen que cuidarse a sí mismas es una señal de debilidad. Creen que 8 horas de sueño es para los débiles, y relajarse en la playa es para los perezosos.
Pero las personas mentalmente fuertes son conscientes de que tienen que cargar sus pilas si quieren ser los mejores. También saben que divertirse y jugar no son enemigos del éxito, sino el sello de una buena vida.
No se dejan arrastrar por la idea de estar ocupados. Al contrario, hacen del cuidado personal una prioridad.
