México cuestionó el silencio cómplice de la Organización de Estados Americanos (OEA) frente al golpe de Estado en Bolivia y solicitará una reunión urgente.
Solicitará la reunión urgente considerando que a pesar de las violaciones cometidas en Bolivia la respuesta de la organización ha sido silencio.
Reiteró que su gobierno hará valer el derecho de asilo que México ha ejercido históricamente y no acepta un gobierno militar, como lo exigen los países de América Latina.
El anuncio lo hizo el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, en la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador donde expuso la postura sobre los sucesos de Bolivia, informa Prensa Latina.
Reiteró que México califica al hecho como un golpe de Estado, considerando que el expresidente Evo Morales planteó un reconteo auditado de votos y nuevas elecciones, sin embargo, la respuesta fue una renuncia solicitada por las Fuerzas Armadas.
Ebrard insistió en que es inadmisible que las fuerzas armadas de un país pidan la renuncia de un presidente electo por el pueblo y en funciones.
Señaló que la situación en Bolivia fue promovida por militares y candidatos presidenciales opositores y que Morales renunció para evitar una guerra civil.
“Es un golpe de estado, no hay dudas, porque el ejército pidió la renuncia del presidente, algo inconstitucional en el país”, dijo.
En consecuencia, dijo que la postura de Mexico será reivindicar el orden constitucional y la democracia en Bolivia.
AVN
