Durante un trabajo de investigación y seguimiento de varias semanas a una peligrosa banda que opera en la parroquia Pedro Arévalo Aponte del municipio Santiago Mariño, Aragua, y que mantiene conexión directa con el grupo delictivo “El Tren de Aragua, funcionarios de la Guardia Nacional adscritos a la 5ta Compañía de Santa Cruz, cumpliendo instrucciones de la superioridad en materia de seguridad ciudadana y las políticas del Gobierno Nacional y regional sostuvieron un fuerte intercambio de disparos en horas de la noche del lunes.
Los cadáveres fueron trasladados a la Morgue de Caña de Azúcar
La situación irregular ocurrió en la calle Colón del sector La Ganadería, vía a Polvorín del municipio Mariño a eso de las 10:30 de la noche, según la información transcendida a los medios de comunicación social.
De acuerdo a las fuentes consultadas, las comisiones castrenses se dirigieron a esa zona, previo a varias denuncias que estaban siendo procesadas sobre el cobro de vacunas, extorsión, secuestro, robo y hurto de vehículos, homicidios y desplazamiento de trabajadores del campo, y de pronto avistaron a unos sospechosos.
Seguidamente los guardias nacionales, tomando las medidas correspondientes al momento de registrarse el evento, dieron la voz de alto a los individuos y éstos mostrando una conducta bélica y desafiante, desenfundaron sus armas de fuego y en medio de la oscuridad de la noche respondieron con balas.
Ante esa eventual sorpresa, los castrenses se vieron en la obligación de utilizar sus armas de fuego para neutralizar la acción irregular de los presuntos delincuentes. Por espacio de unos 20 minutos se produjo un intercambio de disparos.
Durante el enfrentamiento, dos de los antisociales cayeron heridos y en aras de garantizarles sus vidas, fueron trasladados a un centro asistencial del municipio, falleciendo luego a causa de las heridas. El resto de los sospechosos se dio a la fuga.
Se dijo que los mismos no portaban documentos de identificación, y de acuerdo a las denuncias formuladas en su contra, eran conocidos con los remoquetes de “El Cara de Perro” y “El Jordán”, quienes eran miembros activos de la banda de “El Patán”, y ésta a la vez mantenía conexiones con “El Tren de Aragua.
DESMANTELARON CENTRO DE OPERACIONES
En la visualización del escenario, los militares incautaron dos pistolas de alto calibre, correspondientes a una Glock, modelo 19, calibre 9 sin seriales y una Taurus, seriales TQK44964 con dos cargadores y 10 cartuchos sin percutir.
Asimismo retuvieron una motocicleta marca Bera, placas AC5L42G y además se logró el desmantelamiento del centro de operaciones de la organización criminal que viene actuando en toda esa zona de la parroquia Pedro Arévalo Aponte.
Durante el procedimiento, los guardias nacionales decomisaron ciento cincuenta cartuchos, calibre 9; ciento veinte cartuchos de Fusil de Asalto Liviano, calibre 7,62; 20 cartuchos de escopeta, calibre 12; seis cargadores de Fusil, siete cargadores de subametralladora tipo UZI, siete radios portátiles de comunicación de alta frecuencia.
Se dijo que “El Patán” y su secuaces aparecen vinculados e investigados por los delitos de homicidio, extorsión y secuestro, entre otros hechos previstos y sancionados a través del Código Penal Venezolano.
Se informó que la actuación de los militares fue notificada a los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas y al Ministerio Público.
“ANDABA CON MALAS AJUNTAS”
María Bautista, hermana de uno de los fallecidos, identificó a su pariente como Jesús Bautista Plánchez, de 22 años de edad, padre de dos niñas, una de un año y otra que viene en camino.
Actualmente residía en la comunidad de Samán Tarazonero del municipio Mariño, y “estoy clara de que mi hermano andaba por malos pasos. Tarde o temprano caería muerto en una situación como la ocurrida en la noche del lunes”.
“No podemos ocultar el sol con un dedo”, dijo la joven que se acercó este martes al Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses, con sede en Caña de Azúcar, dijo.
Destacó además, “yo tenía como tres meses que no sabía de su paradero”.
“La noticia sobre su muerte me llegó en la madrugada de ayer. Una persona me informó que debería presentarme a primera hora de la mañana a la Morgue de Caña de Azúcar porque mi hermano había muerto en una situación muy confusa y en efecto su cuerpo está aquí”, afirmó en un tono triste.
Concluyó señalando lo siguiente: “Las razones de ese hecho las desconozco. No se si trató de un enfrentamiento o fueron unos desconocidos que lo asesinaron a tiros. Lo cierto del caso es que tengo a mi hermano muerto”.
“Y del otro individuo no se quien es”, dijo la denunciante. Vale precisar que el caso está bajo averiguación de los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de Turmero.
LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
fotos | RAFAEL SALGUERO
