Conociendo la herencia religiosa e histórica de Santa Cruz

Memorando el madero donde se dio la más grande muestra de amor incondicional que puede en el mundo existir, como lo fue la pasión y entrega de Jesucristo por la humanidad, en Aragua uno de sus pueblos lleva su nombre, y no en vano desde su fundación su acervo se caracteriza entre otras cosas, por la fe y devoción cristiana, este lugar no es otro que Santa Cruz.

En su fervor cristiano hace honor a su nombre

Con vestigios del pasado que aún se niegan a morir y arropada ciertamente por la trepidante postmodernidad, la capital del municipio José Ángel Lamas, enclavada en el centro de los frescos valles aragüeños sigue allí desde finales del siglo XVIII, cuando recibió real fundación como parroquia eclesiástica, para regalarnos a través de alguno de sus cultos habitantes, parte de la historia e idiosincrasia que nos identifican.

NACIDA DE LA FE Y PARA LA FE

Tan cerca y a la vez algo alejada de Maracay, Santa Cruz de Aragua es uno de esos pueblos que aún huele a historia, tradición y arraigo, sus lugareños destacan por la cordialidad y sencillez, y si algo positivo hay que resaltar en la actualidad, son sus calles pulcras, su hermosa plaza Bolívar y ese amor de muchos santacrusences por querer preservar sus tradiciones.

Uno de esos valiosos ciudadanos amantes de la historia es el cronista Gerardo Hernández, quien es sucesor desde el año 2009 en este cargo, del recordado Juan Bautista González, no menos destacado por sus grandes aportes investigativos en el cultivo de las tradiciones locales de Santa Cruz.

Santa Cruz un lugar lleno de historia

Pero siguiendo con Hernández quien nos recibió en su residencia, la cual es una de las casas vetustas del pueblo, la que como en un museo, guarda innumerables objetos antiguos, así como fotos en blanco y negro que representan un gran archivo histórico de toda la localidad, es desde allí donde comienza su narración acerca de los orígenes sobre la pequeña capital lamense.

Cuenta el cronista: “El origen de Santa Cruz de Aragua está estrechamente ligado a la fe religiosa de nuestro país, pues en todo asentamiento humano, el cual comienza a perfilarse, primero como un caserío, luego más tarde como un poblado y así una urbe, en su conjunto comienza a demandar necesidades, es decir, todos sus habitantes comienzan a necesitar cosas, tales como el sustento, la diversión y una muy importante como es el auxilio espiritual”.

Hernández comentó que la aglomeración de personas en la zona, obedeció en primer lugar a la producción agrícola, lo cual en su primitiva etapa fue poblada por indígenas, y de allí que en el mestizaje, la colonización entre otros, atrajo a los fértiles suelos, el interés de terratenientes y comerciantes.

“Gracias a las llamadas encomiendas esta zona comienza a recibir gente interesada en los cultivos del tabaco, algodón y añil, las cuales luego se mejoraron con otras semillas traídas de otros lugares como Europa, y este auge de la producción agrícola, que en aquel entonces era como el petróleo ahora, y por eso llamó la atención de muchos inversionistas”.

“Entonces Santa Cruz comenzó a tener una población tanto fija como flotante y pasó que al haber muchas fuentes de empleo aquí, numerosas personas comenzaron a establecerse fijas y el pueblo así fue creciendo y se fue consolidando”.

Siguiendo el relato de nuestro historiador, tenemos que para el año 1780 en Santa Cruz había una población de 800 personas, lo cual era un número bastante elevado para la época, y en 1781 el obispo Mario Martí, que era el pontífice de Caracas y Venezuela en vista a la necesidad de la feligresía naciente, ya que ésta no tenía sitio donde congregarse cubriendo esta necesidad las parroquias de Turmero y Cagua, fue entonces que como petición expresa de un líder comunitario llamado Juan Meliz, en acuerdo con la comunidad, solicitaron al obispo la construcción de una propia parroquia en Santa Cruz.

“Santa Cruz de Aragua fue creada como parroquia eclesiástica el 23 de octubre de 1782, según decreto del obispo Mario Martí, logra la autonomía municipal el 2 de octubre de 1986 e inicia el manejo de sus recursos el 5 de enero de 1990, cuando se instala su primer Concejo Municipal”.

NACE SANTA CRUZ DEL ESCOBAR O DEL ESCOBAL

Dos teorías se reseñan acerca del origen sobre el nombre de Santa Cruz del Escobar o Escobal, las cuales son, la primera de ellas es que debido a que en las zonas producto de la planta denominada escoba, y que utilizan para elaborar esta herramienta doméstica, al ser abundante en Santa Cruz, le llamaba “los lugares del escobal”.

La otra conjetura es que un sacerdote de Cagua de apellido Escobar y del siglo XVIII, el cual era muy preocupado por su feligresía, no sólo la de Cagua, sino las de toda su jurisdicción, que en ese momento un caserío como lo era Santa Cruz, pertenecía al mismo, pues sería en honor a este que se daría el patronímico al naciente pueblo.

PATRIMONIO DE LA BELLA SANTA CRUZ

Plaza Bolívar, centro de reunión de la colectividad

* PLAZA BOLÍVAR

Inaugurada el 19 de abril de 1910, y construida en el gobierno regional que presidía el doctor Reimundo Anduela Palacios, hijo, esta ágora se hizo para honrar la memoria del Padre Libertador, aquel que trasmontó el páramo de Pisba en la extraordinaria hazaña conocida como el Paso de los Andes.

En antaño sirvió como complemento a la Iglesia que se hallaba en el sitio y que hoy ocupa el Grupo Escolar Rafael Briceño Ortega y el Ambulatorio de Santa Cruz, por otro lado la misma fue remodelada por el gobernador del estado Aragua, Ildegar Pérez Segnini, en el año 1963, más tarde fue objeto de una transformación total por parte de la Alcaldía del municipio José Ángel Lamas, orientada por la profesora Nancy López Aljorna, reinaugurándose el año 2000 y hoy es sin duda alguna, el centro de reunión de la colectividad, y es de resaltar su cuidado y hermosura en la que actualmente se preserva.

* IGLESIA NUESTRA SEÑORA DE MONSERRAT

Icono del fervor cristiano santacrucense su construcción se inicia a finales del Siglo XVIII, cuando era párroco de Santa Cruz, el padre Manuel Antonio Fajardo, quedando en ese entonces inconclusa, pero para el año 1952, la Junta Pre-Templo ordena colocar granito al piso y en el año 1988 se construye la fachada, torre y campanario, logrando el aspecto físico que actualmente exhibe.

* CASA DE LA CULTURA “CLAUDIO CASTILLO”

Tan antigua como Santa Cruz la Casa de la Cultura, icono de la herencia cultural del santacrucense, la misma fue inaugurada el 8 de septiembre de 1984 y un año más tarde, el gobernador José Rafael Galíndez ordena la construcción del Auditórium que fue estrenado el 5 de septiembre de 1986, pero es el Concejo Municipal del municipio José Ángel Lamas, quien la bautiza el 9 de junio de 1991, con el nombre Claudio Castillo.

No obstante, se conoce que en los terrenos donde se iba a construir un mercado principal, en vista al abandono del proyecto, más tarde allí mismo se inaugura la Escuela Federal Graduada Rafael Briceño Ortega, esta funcionó hasta el 19 de abril de 1958 cuando el gobernador Augusto Márquez inaugura la nueva sede de dicha escuela, que es donde queda actualmente.

Pero del antiguo edificio salió la primera promoción de sexto grado de Santa Cruz, además allí se hacían bailes en las fiestas patronales y maravillosas veladas artísticas, sin embargo, abandonado a su suerte duró así por muchos años el viejo edificio y se convirtió en lugar donde habitaban indigentes, hasta que en 1981 el Dr. José Casanova Godoy llegó al pueblo, en la bomba lo esperaba el Sr. Juan Bautista González, fallecido cronista de Santa Cruz junto con Vicente Olivo y otros.

Estas personas hacen entrar al gobernador al destartalado lugar y en él le piden que construya una Casa de la Cultura, el Gobernador cumplió con su promesa y el 8 de septiembre día de la patrona del pueblo fue inaugurada.

El 5 de septiembre de 1986 la doctora Estela Rocca de Azuaje inaugura el auditórium. El 9 de junio de 1991 es bautizada con el nombre de Claudio Castillo, destacado artista plástico de la localidad.

Cabe destacar que actualmente la Casa de la Cultura, joya de incalculable valor para Lamas, es remodelada por la actual gestión municipal.

Quien pisa por primera vez Santa Cruz no se va jamás

Finalmente nos despedimos con un hasta pronto, pues es mucho lo que queda aún por recorrer de este maravilloso lugar, y tomando un poco de la leyenda que nace del imaginario local, podemos decir que visitar a Santa Cruz es necesariamente dejarse envolver por una magia particular que de seguro obliga a cualquier extraño o propio a volver, pues se dice que “quien le pisa por primera vez, no se va jamás”.

JOSÉ LUIS BLANCO | elsiglo
fotos | JOEL ZAPATA