“A mi esposo lo mataron luego de llevárselo bajo engaño”

Norvelis de González, quien se acercó en la mañana de ayer a los predios del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses, denunció públicamente que su esposo fue asesinado a mansalva y sin ninguna justificación.

Afirmó que los hechos comenzaron a eso de las 9:30 de la noche del miércoles, “cuando mi esposo Hugo Andrés González Tirado, de 28 años de edad, nuestros cuatro hijos y yo nos fuimos a dormir producto de una apretada agenda de trabajo en el campo”.

Hugo Andrés González Tirado, murió en un procedimiento que está bajo sospechas de un homicidio

“Pasadas las 12:00 de la medianoche para el jueves, me levanté de la cama para dirigirme al baño e inmediatamente retorné al cuarto, cuando sentí que alguien abría la puerta de la vivienda, ubicada en el sector El Alto, donde tenemos una finca, en la cual mi compañero sentimental cultivaba diversos rubros”, dijo.

“Seguidamente le notifiqué sobre esa situación irregular a González y él me respondió que la niña mayor se habría levantado”, me comentó. Sin embargo, “yo le refuté su posición”.

Cuando él se levantó “observamos la sala full de personas vestidas de verde y apuntándonos con armas largas”, dijo la denunciante, quien añadió además que “esos individuos me obligaron a acostarme en la cama y que me cubriera el rostro”.

Norvelis de González defendió el comportamiento de su esposo

“Les manifesté a esos supuestos guardias nacionales que era una falta de respeto ingresar a una vivienda cuando todos dormíamos y yo estaba en prendas íntimas”, dijo.

“En su requisa dentro de la casa, localizaron una escopeta, y mi esposo todo asustado les aseguró que ese armamento tenía sus papeles en regla y tenía como demostrarlo ante las instancias correspondientes”, afirmó la señora.

Minutos más tarde, “se escuchó un silencio y no vi más a mi compañero sentimental, seguidamente les indiqué a las niñas que esos guardias se habían llevado a su papá preso por la escopeta”, adicionó la querellante.

Ya pasadas las 5:00 de la mañana del jueves, “salí a buscarlo y le pregunté a un vecino que si no había visto nada anormal en la zona y él me respondió lo siguiente: “Mija, en la urbanización La Zamarrera del sector El Arco, se escucharon unos tiros y ahí se observa es un charco de sangre, me parece que mataron a unas personas”.

“Resulta que allí le quitaron la vida al padre de mis hijos y al dirigirme a la Subdelegación de La Victoria, me informaron que Hugo Andrés había muerto en un enfrentamiento con la GN, vinculándose en un supuesto acto de extorsión, y además que él estaba en ese lugar esperando unos camiones de pollo para robar la carga, cuando esa versión es totalmente falsa”.

“A mi esposo lo sacaron de su casa, y el arma que se llevaron esos militares tiene la documentación respectiva y no entiendo como enlodaron su reputación. Se trataba de un hombre que nunca llegó a pisar un comando policial ni mucho menos tuvo cuentas pendientes con la justicia”, adicionó la declarante.

“Era un esclavo del trabajo del campo”, dijo. “La finca y la escopeta las heredó mi esposo de su padre, y lo más lamentable del asunto es que se llevaron los papeles”, agregó.

A través de los representantes de los medios de comunicación social, la señora Norvelis de González exigió al Ministerio Público y a la comisión de los Derechos Humanos un pronunciamiento sobre la muerte del trabajador del campo. “Sólo pido justicia”, finalizó diciendo. Por otro lado, se informó de manera extraoficial que la otra persona muerta en ese sitio, respondía al nombre de José Manuel y era vecino lejano de Hugo Andrés. Los cadáveres fueron trasladados en la mañana del jueves a la Morgue de Caña de Azúcar.

La información facilitada a los medios de comunicación social es que esos individuos habrían muerto en un enfrentamiento con funcionarios del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro de la Guardia Nacional y en la zona se recuperaron unos armamentos. El caso está bajo averiguación de los funcionarios del Cicpc.

LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo