Pica y se extiende caso del vehículo quemado con 4 sujetos en La Guzmán

De acuerdo a las informaciones que se conocieron, de manera extraoficial, en la mañana de este jueves a través de fuentes vinculadas a las investigaciones, sujetos aún por identificar a bordo de varias camionetas, asesinaron de múltiples disparos a un ciudadano que respondía al nombre de Alberto Antonio Herrera, de 25 años de edad.

 

El caso del carro quemado en La Guzmán pica y se extiende

El crimen ocurrió en horas de la tardecita del martes en un sector de la comunidad de Guayabita en la parroquia Pedro Arévalo Aponte del municipio Santiago Mariño.

Al parecer, los delincuentes lo acribillaron de múltiples disparos, y se presume que utilizaron armamento de largo alcance.

Y la causa del crimen se inclinaría presuntamente a un posible acto de venganza, retaliación o ajuste de cuentas entre grupos que mantienen pugnas por el control de la zona.

Se comentó que Herrera era el propietario del vehículo Renault, modelo Logan, de color gris, matrícula AE386AM, modelo 2007, en donde aparecieron quemadas cuatro personas, tres de ellas en la maletera y la cuarta en el asiento trasero en la mañana del lunes en el sector La Guzmán, vía a Polvorín.

Se presume que ese ciudadano habría salido de su residencia en ese vehículo y en sus enemigos fueron tras su búsqueda con la intención de saldar cuentas pendientes.

En un sector del cual se desconoce, los antisociales lo interceptaron y después procedieron a quemarlos dentro del carro, cerca de una capilla ubicada en La Guzmán, se dijo a los reporteros. Ese hecho, según los vecinos, ocurrió a las 10:00 de la noche del domingo pasado.

Sin embargo, los delincuentes se confundieron, ya que Alberto Antonio no viajaba en ese momento sino que se lo prestó a Jhonny José Paredes Araujo, quien trabajaba como técnico en refrigeración, que realizaría una diligencia en Turmero.

Y en aras de ajustar cuentas pendientes, horas más tarde, los delincuentes ubicaron el paradero de Herrera, quien estuvo presente en la mañana del lunes en el Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses, en Caña de Azúcar, y lo llevaron bajo engaño hasta una zona de Guayabita, en donde procedieron a ejecutarlo de múltiples disparos.

Se sospecha que esa persona era un confidente de la policía científica. Sin embargo, esa tesis está bajo averiguación de los funcionarios de la Base de Homicidios de San Pablo.

Los sabuesos practican una serie de allanamientos y realizan investigaciones de campo para dar con el paradero de los homicidas. El cadáver de la víctima fue trasladado a la Morgue de Caña de Azúcar.

LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
foto | RAFAEL SALGUERO