¿De qué se trata el “síndrome del impostor”?

¿Te ha pasado que sientes que no mereces el éxito que has alcanzado? ¿O que tus cualidades no son suficientes para el lugar en el que trabajas?

Se trata de pensamientos o emociones que se relacionan con la culpa o la inferioridad. Muchos de los que tienen este síndrome tienen la creencia de que su éxito se debe a golpes de suerte o errores de sus superiores; así los que sufren de este trastorno piensan que no están aptos para enfrentar las tareas que se les han entregado.

Además del ámbito laboral, las personas también pueden tener esta sensación en lo académico, cuando se trata de calificaciones o reconocimientos, o en lo social y las relaciones interpersonales. Incluso puede presentarse en relaciones sentimentales cuando alguien se considera “muy poco” para otra persona.

Este síndrome no se encuentra clasificado en los diferentes trastornos de estudio clínico, pero es posible relacionarlo con personas o situaciones, ya que los síntomas que se presentan en estas personas son prácticamente los mismos.

Lo que lo convierte en un síndrome reconocido es que aproximadamente siete de cada diez personas lo han padecido en algún momento de sus vidas. Es más propenso a aparecer en personas con altos niveles académicos y profesionales exitosos, y está ligado en gran medida a la baja autoestima.

Es normal que las personas que sufren de este síndrome nunca estén conformes y siempre sientan que nunca estén a la altura del éxito que logran; para ellos mismo, no son lo suficientemente buenos en lo que hacen.


Por lo común de este síndrome es normal escucharlo de figuras reconocidas, así es el caso de Michelle Obama, esposa del expresidente estadounidense Barack Obama, quien en una convención estudiantil en Londres en diciembre del 2018 confesó que todavía sufría del “síndrome del impostor”, esto sorprendió a los presentes ya que la imagen que refleja Obama es de una mujer segura y llena de confianza.

Actrices como Emma Watson, Natalie Portman, Meryl Streep y Kate Winslet también han admitido haber pasado por el síndrome.