Alejandra Guzmán reveló la experiencia que le hizo tocar fondo

No cabe duda que la vida de la cantante mexicana Alejandra Guzmán no ha sido nada fácil, pese a que cumplió uno de sus más grandes sueños, que fue ser cantante, ella asegura que ha vivido cosas muy dolorosas.

Uno de los capítulos más fuertes de su vida fue cuando la artista perdió a un hijo que realmente deseaba tener con Gerardo Gómez Borbolla, quien fue su pareja en aquel entonces (2003).

La hija de Silvia Pinal y Enrique Guzmán sufrió un aborto, suceso que la hizo verdaderamente “tocar fondo”.

“Me levanté llena de sangre, no había nada qué hacer. No acepta uno, no sabes qué pasó. Estuve borracha después de que lo perdí, estuve como un mes borracha y no logré morirme, que era lo que yo quería”, se sinceró la artista en la cadena Image Televisión, de México.

Fue inmediatamente que su hermano Luis Enrique nuevamente la ingresó a rehabilitación. “Yo tengo cuatro rehabilitaciones en mi vida”, contó Alejandra.

Enrique Guzmán, padre de la cantante, culpó a los medios de comunicación por la pérdida tan grande, ya que habían revelado que Gerardo se encontraba en medio de un proceso legal por falsificación de documentos. Estas declaraciones sucedieron justo después de que la pareja había anunciado su boda.

Alejandra luchó con todas su fuerzas para rescatar la relación, pero las cosas no mejoraron y decidieron separarse, para ese entonces la artista sufrió otro aborto, el cual fue por decisión propia.

“Tuve que decidir o el bebé o yo. Y al final eran muchas mujeres que me comprenden, porque no es fácil también tomar una decisión así. Lo tuve que hacer, porque o era eso o era mi vida y yo tenía que optar por seguir viviendo mi vida, y salir adelante con Frida (su primogénita) y sola, para variar”, confesó en abril pasado de acuerdo a la cadena Imagen Televisión.

Actualmente, la cantante de nuevo se encuentra en medio de la polémica debido a las fuertes declaraciones que ha hecho su hija Frida Sofía en las redes sociales. Alejandra no había dado respuesta a los comentarios negativos que había recibido por parte de Frida, hasta que concedió una entrevista al periodista Gustavo Adolfo Infante.