Barry se convirtió este sábado en el primer huracán de la temporada atlántica de este año antes de tocar tierra en la costa sur de Luisiana, donde se prevé que ocasionará graves inundaciones debido a las torrenciales lluvias y marejada ciclónica, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de EE.UU.
En el boletín se indicó que Barry es un huracán categoría 1 en la escala Saffir/Simpson de un tope de cinco con vientos máximos sostenidos de 75 millas por hora (120 km).
El NHC precisó que el ciclón se encontraba a esa hora 40 millas (65 km) al sur de la ciudad de Lafayette y unas 50 millas (80 km) al oeste de Morgan City, donde se prevé tocará tierra en las próximas horas.
Millones de habitantes de la costa de Luisiana se prepararon desde este viernes para la llegada de la tormenta tropical, que amenaza con provocar lluvias e inundaciones potencialmente devastadoras en el estado sureño de Estados Unidos.
Las autoridades incrementaron las evacuaciones y las aerolíneas cancelaron los vuelos, luego de que el Centro Nacional de Huracanes pronosticara que la fuerte tormenta podría alcanzar el estado de huracán y rugir a lo largo de la costa central de Luisiana.
Mezcla peligrosa de condiciones
Luisiana se enfrenta a una confluencia de condiciones extraordinariamente peligrosa, dijeron los expertos.
El nivel del río Misisipi, ya crecido por lluvias históricas e inundaciones río arriba, estaba a 4,9 metros de altura en Nueva Orleans.
Con marejadas ciclónicas de entre casi un metro y cerca de dos, y un pronóstico de lluvia de entre 25 y 50 centímetros, el río podría romper el sistema de diques de más de seis metros de altura que protege a la ciudad de 400.000 habitantes.
“Gran parte de la costa del Golfo, especialmente Luisiana, ya tiene niveles de agua extremadamente altos y, por lo tanto, las fuertes lluvias y cualquier posible marejada ciclónica darán lugar a peligrosas inundaciones repentinas“, dijo en un comunicado Jill Trepanier, experta de la Universidad Estatal de Luisiana.
Mike Yenni, presidente de la parroquia Jefferson Parish cerca de Nueva Orleans, dijo que la comunidad ha dado el paso “sin precedentes” de cerrar cientos de diques, en gran parte debido a los altos niveles casi históricos del río Misisipi.
Las autoridades cerraron autopistas en varios lugares a lo largo de la costa cuando las aguas de la inundación comenzaron a adentrarse.
EFE