El sector Rafael Urdaneta de Cagua, mejor conocido como La Segundera, viene padeciendo desde hace mucho tiempo del colapso del sistema cloacal, lo que se refleja en calles y veredas anegadas de las aguas negras.
Sin embargo, últimamente, el avance de la contaminación está provocando enfermedades en la piel, lo que mantiene muy preocupados a los vecinos.
Específicamente las veredas 33 y 34 son ríos de aguas negras, por la cual los residentes se ven en la obligación de escurrir los excrementos y soportar malos olores.
Yelitza Ascanio resaltó: “Tenemos como 3 años con esta problemática, todos los días tengo que sacar el agua que se empoza aquí frente a mi casa para poder salir. Hay personas que están sufriendo de enfermedades e inclusive niños que han caído en esas aguas putrefactas y le han causado enfermedades”.
Alejandra Castro afirmó: “Esto tiene muchos años y nos está dañando las estructuras de las casas, ya las paredes están presentando filtraciones y las cloacas de las casas se rebosan, estamos en una situación de emergencia, así no se puede vivir”.
Castro relató que han “ido a todas partes y nada, la Alcaldía no responde por esta situación. Hay sitios donde han abierto las calles y han dejado los escombros, ahora hay tierra, piedras, y aguas sucias”.
Los vecinos denuncian que se están dando problemas respiratorios en los niños, y adultos mayores. Sobre el punto, Luisa Marval denunció que la han tenido que trasladar varias veces a centros de salud porque se ha visto complicada por las enfermedades que le aquejan.
“Desde que estoy aquí se me alborotó una alergia y una enfermedad de la piel, tengo 8 años viviendo en el sector, de los cuales tengo cinco con esta problemática de salud, ya no aguantamos más, nuestros nietos pasan por aquí brincando charcos”, denunció Marval.
Para poder salir de La Segundera los vecinos no pueden utilizar la calle principal, que comunica con el sector Toco, y quienes se arriesgan deben hacerlo con sus hijos a cuesta.
Finalmente, los habitantes de este popular sector de Cagua hacen un llamado a las autoridades locales y regionales para que se acuerden de que el sector Rafael Urdaneta existe y se propongan resolver, de una vez por todas, la problemática del colapso de las cloacas.
JOSÉ CARPIO G.| elsiglo
