Pasan los años, y aunque pareciera no estar en vigencia la problemática del Lago los Tacarigua, la urbanización Mata Redonda sigue perdida al sur de Maracay, con graves problemas de servicio y en la zozobra que representa el muro.
Casi tres años desde que el muro fue reforzado, los habitantes del sector siguen aferrados al deseo de ser indemnizados de forma adecuada por el Estado.
“No veo el día ni la hora en que ya seamos reubicados o nos cancelen nuestras viviendas”, es el clamor de Marlene Bermúdez, habitante del lugar, quien presenta además una discapacidad, condición que empeora su situación.
“El agua negra corre en todo el frente de mi casa, por lo tanto esta y la vivienda de al lado, son las más afectadas, pues el olor es insoportable y dentro las casas el drenaje no baja, ni en el lavandero, ni en el fregadero”, dijo.
“Yo me caí y sufrí una fractura a nivel de la cadera, eso por tratar de limpiar eso allí, cosa que para mí es imposible, por eso cuando mis hijos y nietos vienen son los que limpian y despejan un poco toda esa área”, acotó la ciudadana.
Tanto para la señora Marlene como para la mayoría de los vecinos de Mata Redonda, hoy sólo queda la incertidumbre sobre aquella sentencia del año 2006 y luego ratificada en 2007 y en 2012, mediante la cual el TSJ dictaminaba el reconocimiento del valor económico de todas las viviendas afectadas, pero hoy siguen en la espera y sin respuestas por parte del estado sobre este asunto.
No obstante, mientras pasa el tiempo, los vecinos de este sector conviven entre la inmundicia de las aguas servidas desbordadas, el alto nivel de zancudos y demás plagas que genera las ruinas de las casas ya demolidas, aunado a la inseguridad que a consecuencia de ser una zona de alto riesgo presentan.
Las zonas con mayor deterioro son aquellas que se encuentran entre la manzana 19 y la 20, ya que por ser las más cercanas al lago y por estar en las áreas más bajas, presentan un colapso total de los drenajes de las viviendas, mientras que por las calles fluyen torrentes de aguas negras.
Álvaro Alejo, también residente, acotó la ausencia del agua potable en la que desde meses atrás vienen padeciendo, por lo que el agua llega una sola vez cada tres semanas, lo que de verdad les complica la existencia, pues con los problemas de insalubridad de esta zona, sumado a la falta de agua se aceleran las enfermedades sobre todo en niños y en las personas adultas”.
“Aquí más nunca escuchamos nada acerca de la cancelación de nuestras viviendas, ni de reubicación”, concluyó el residente.
Por su parte, Júnior Borges indicó, “yo vivo hacia la zona más alejada donde es peor la situación, pues cuando llueve sino prende la bomba de achique, como de hecho ocurrió hace dos semanas atrás, todas las casas de la zona se anegan”.
“Para allá tampoco fumigan, lo que hace que después de las 5:00 de tarde, cuando ya comienza a caer la noche, uno no pueda estar tranquilo fuera de su casa, pues la nube de zancudos es insoportable”, agregó Borges.
Finalmente, los habitantes de Mata Redonda y las zonas circunvecinas, constituyen ser un foco urgente que requiere atención inmediata por parte de las autoridades competentes, ya que mientras pasan los días, la situación con el posible colapso del muro de contención nuevamente, es un mal en el que las consecuencias serían de grandes y terribles dimensiones, igualmente todos los ciudadanos que viven en el lugar piden de primera mano al Gobierno, la asistencia más elemental que les permita sobrellevar las cargas en su diario vivir.
JOSÉ LUIS BLANCO | elsiglo
