Hasta la tarde de este martes, permanecía en una cava refrigerada de la medicatura forense, en Colinas de Bello Monte, el cadáver del capitán de corbeta de la Armada Venezolana, Rafael Acosta Arévalo, de 35 años de edad, quien murió, presuntamente al ser sometido a torturas.
Trascendió que por la medicatura forense, evadiendo la presencia de reporteros han pasado para enterarse del caso, representantes del Ministerio Público, del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales, y Criminalísticas y del Tribunal que conoce el caso del oficial.
Como se recordará, efectivos militares de la Dirección General de los Servicios de Contra Inteligencia Militar (Dgcim) y funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), el pasado 21 de junio del presente año, llevaron a cabo operativos en diferentes sectores de la Zona Metropolitana de Caracas, y practicaron la detención de cuatro oficiales militares y dos comisarios jubilados de la Policía Técnica Judicial (PTJ).
Los oficiales detenidos, de la Aviación Venezolana: general Miguel Cisco Mora; los coroneles Francisco Torres Escalona y Miguel Alberto Castillo y el capitán de corbeta de la Armada Venezolana, Rafael Acosta Arévalo.
Mientras que los comisarios de la PTJ, responden a los nombres de Miguel Ibarreto, quien llegó a ocupar el cargo de jefe de la División Contra Homicidios y también de la División contra Drogas; y el comisario José Valladares.
Los militares fueron recluidos en la sede del Dgcim, ubicado en el sector Boleíta norte, municipio Sucre del estado Miranda. A los detenidos los acusaron de haber participado en los sucesos del 30 de abril, donde gente de la oposición se concentró desde tempranas horas de la mañana en el Distribuidor Altamira de la autopista Francisco Fajardo, municipio Chacao, acto convocado por líderes de la oposición como el diputado Juan Guaidó y Leopoldo López.
También en el lugar se pronunciaron militares activos que decidieron apoyar a la dirigencia opositora. En el suceso hubo hechos de violencia que dejó saldo de tres personas muertas y más de 20 heridos.
El 28 de junio fue trasladado del Dgcim, a los tribunales militares el capitán de corbeta Acosta Arévalo. No podía movilizarse por sus propios medios e ingresó en silla de ruedas. Cuando iba a comenzar la audiencia el militar se desmayó y el juez ordenó su traslado al Hospital Militar Dr. Vicente Salías, popularmente conocido como el hospitalito del Fuerte Tiuna. En horas de la madrugada del 29 de junio falleció.
El abogado Alonso Medina Roa, quien asistía jurídicamente a Acosta Arévalo, señaló en su oportunidad, que el oficial murió siendo inocente, por cuanto no fue enjuiciado por su presunta participación en los sucesos del 30 de abril. También el profesional del Derecho reveló que su cliente presentaba señales de haber sido torturado.
Posteriormente el fiscal general designado por la Asamblea Nacional Constituyente, Tarek William Saab reveló que por la muerte del capitán de corbeta Acosta Arévalo, fueron detenidos por su presunta responsabilidad, el teniente Antonio Tarascio Ascanio, de 22 años, y el sargento Estiven Zárate, de 23 años, ambos de la Guardia Nacional Bolivariana, quienes estaban adscritos al Dgcim y quedaron recluidos en el lugar donde permaneció preso el capitán de corbeta.
EFRÉN PÉREZ HERNÁNDEZ | elsiglo -Caracas
