Polvorín lugar de asueto, tradición y siembra

Habitantes de Polvorín, municipio Mariño, en medio de la crisis actual y adaptándose a la situación país, celebraron con alegría y muy llenos de esperanza las festividades del 24 de junio, en donde la tradición de bailar a San Juan Bautista constituye el motivo principal para que propios y visitantes confluyan en esta fecha especial para el pueblo aragüeño.

Rodeados de montañas, cuyos paisajes naturales, propios de una zona agrícola, recrean parte de la flora y fauna de la región central de nuestro país, aunado a un afluente de agua cristalina que recorre el lugar, Polvorín es sin duda, una gran opción para quienes aprovechan asuetos, como el del pasado puente del 24 de junio, para distraerse, divertirse y recrearse, compartiendo en familia o con amigos y así disfrutar de la naturaleza.

Al llegar al pueblo, como anfitriones del mismo se encuentra la familia Calanche, quienes son los herederos del legado de la Cofradía de San Juan Bautista, la cual lleva más de cincuenta años haciéndole homenaje al Santo cada 24 de junio a las 12:00 de la noche.

Dicha cofradía la integra actualmente un aproximado de ochenta personas, entre adultos y niños de la zona, y en los albores de la celebración, la cual se da desde el día 23, varias agrupaciones de bailadores sanjuaneses llegan a Polvorín para encontrarse entre tambores y júbilo.

Miguel Calanche, residente de Polvorín y responsable de la cofradía de San Juan Bautista, cuenta sobre esta manifestación popular, “nosotros bailamos a San Juan Bautista a partir de las 12:00 de la noche, y lo llevamos por la calle hasta el río y allá lo mojamos”.

“Esto es una tradición familiar, la cual ha permitido que el pueblo de Polvorín se de a conocer, porque mucha gente viene en esta temporada para disfrutar del pueblo y de las actividades de San Juan que se realizan como tal”, agregó.

“Aquí a Polvorín vienen sanjuaneros de las zonas agrarias vecinas, y también gente de otras partes más lejanas, tales como San Mateo, Guanarito, Sorocaima, entre otros”.

Según Calanche, su padre falleció hace 16 años, quien tenía su mismo nombre, fue el fundador de la agrupación que hoy sigue haciendo vida en el pueblo, y aunque ya ha pasado medio siglo desde su creación, el legado sigue siendo transmitido a las nuevas generaciones.

AUSENCIA DE MUCHOS VISITANTES

Por otro lado, el difícil momento actual que viven los venezolanos se ha visto reflejado en la poca afluencia de temporadistas y a las bajas en cuanto a ventas en comparación con años pasados, lo que representa un duro golpe para esta comunidad agrícola y turística de Polvorín.

En un recorrido por el balneario, el propio día del descanso, y a eso de las 10:00 de la mañana, se pudo constatar una ausencia casi total de personas, así como de la gran mayoría de establecimientos de ventas de comida y otros, cerrados.

En este sentido, Migdalia Pacheco, asidua visitante del pueblo y quien reside en Cagua, expresó su punto de vista al respecto; “me vine para acá porque me gusta mucho el pueblo y el balneario, y pensé que por ser puente iba a haber más gente, pero está prácticamente solo todo, la verdad que nunca se había visto tanta ausencia. Yo creo que el problema está aquí, con que no hay puntos de venta, aunado a que el transporte para acá es escaso”.

Migdalia Pacheco

“Unido además a la crisis del país, ya a las familias no les alcanza para venir a pasar un rato y distraerse, ni siquiera a la gente que está cerca, en Maracay y en Cagua, por ejemplo”, agregó Pacheco.

Por su parte, Rafael Páez, habitante y ex comerciante del lugar, indicó que “con el aceleramiento de la crisis las cosas han empeorado, pues este año es muchísimo peor que el año pasado, en cuanto a las bajas de las ventas, ya que a esta hora, por ejemplo, debía haber llegado más o menos personas, sin embargo está solo”.

Rafael Páez

“Yo tuve que cerrar mi negocio de comida por esta misma razón, ya que no me generaba ningún tipo de ganancia, uno por el tema del efectivo, porque aquí no hay señal de nada, y no hay puntos, y la gente por eso no viene, pues el efectivo se hace difícil conseguirlo, y lo otro, por el transporte, para acá hay un solo autobús que sube”.

SECTOR AGRÍCOLA QUE REQUIERE APOYO

No obstante, Polvorín es una de las zonas cuyo potencial productivo es importante en el desarrollo local de Turmero, Maracay y otras zonas adyacentes, pero que para su crecimiento y proyección necesitan del apoyo del sector gubernamental, así los expresan trabajadores de la tierra, que día a día luchan para que una vez que ya han segado el fruto de la siembra, poder llevar su cosecha a los mercados más cercanos.

“Si nos han llegado algunos beneficios, mejor que antes, pues ahora en vista a la necesidad de los alimentos en el país, nosotros los agricultores somos tomados más en cuenta”, son las palabras de Jesús Páez, agricultor de Polvorín.

“Sin embargo, si nos urge que nos habiliten medios de transporte para poder sacar la mercancía hasta el pueblo, ya que el único medio con el que nosotros contamos son nuestros animales, los que tenemos, pero hay quien no tiene, y tiene que pagar mucho para poder llevar su cargamento”, dijo.

Y es que este es uno de los problemas más comunes en la producción de los pequeños agricultores, que en vista a ello, el precio en los mercados de las ciudades aumenta su costo.


Principal medio de transporte de agricultores

Igualmente es importante destacar que muchos trabajadores de la zona agraria, requieren asistencia en cuanto a insumos para la siembra, así como maquinarias que les pueda facilitar su trabajo, pues en la medida en que todos estos recursos les sean provistos y de manera más asequible en cuanto a costos, esto impactará de manera positiva en el desarrollo agrícola de la región, viéndose beneficiada las principales ciudades adyacentes al sector.

Finalmente Jesús Reyes, también agricultor, manifestó su esperanza sobre los cambios que él cree se pueden generar desde la atención, según su criterio, al sector más importante del país.

“En la producción de la tierra está la salida a todos los problemas de guerra e hiperinflación que vive Venezuela, si en verdad se apoya al campesino, al que trabaja la tierra y sobre todo a los más humildes como nosotros, de seguro en poco tiempo estaremos saliendo de esta crisis, pues en menos de lo que se cree, se va acabar el hambre en muchas ciudades”, dijo.

JOSÉ LUIS BLANCO | elsiglo
fotos | RAFAEL SALGUERO