Murió taxista al ser embestido por camioneta de pasajeros

Un ciudadano que trabajaba de taxista en el perímetro de Maracay pereció en un accidente automovilístico ocurrido a las 8:00 de la noche del domingo en la avenida Anthon Phillips al sur de la ciudad.

La víctima se trataba de Jesús Alberto Mariño Franco, de 51 años de edad, quien residía en Los Samanes, padre de seis hijos y de oficio taxista, informó su esposa Naileth Rodríguez.

Manifestó a los reporteros que su compañero sentimental regresaba de San Vicente al oeste de la ciudad, en donde estuvo visitando a unos familiares y de regreso como a las 8:00 de la noche del domingo, conducía un Nissan de color blanco con matrícula de taxi con destino a Los Samanes.

Cuando transitaba tranquilamente por la avenida Anthon Phillips, un conductor de una camioneta de pasajeros de la Unión Los Samanes se le montó sobre el capó y “mi esposo quedó aprisionado en un amasijo de hierro”.

Aunque los bomberos acudieron al sitio a socorrer la emergencia, “uno de mis cuñados extrajo a su hermano de la estructura metálica y lo trasladó al servicio de Emergencia del Hospital Central de Maracay, donde falleció”.

Apuntó la denunciante que el transportista manejaba la encava bajo los efectos de las sustancias alcohólicas y no entiende como profesionales del volante, teniendo una responsabilidad de conducir un vehículo de pasajeros, se desplacen por cualquier vía en ese estado de embriaguez.

Los encargados de levantar los accidentes, llamasen fiscales de la Policía Nacional Bolivariana, deben actuar con “mano dura” contra los irresponsables y suspenderles la licencia de conducir por tiempo indefinido. ¡Hasta cuándo tanta irresponsabilidad!

Apuntó además, “mi esposo tenía alrededor de siete años trabajando de taxista. Operaba en un reconocido supermercado en Los Samanes”, comentó.

Añadiendo que Mariño Franco trabajó por espacio de 27 años consecutivos como gandolero, recorrió muchas autopistas y carreteras nacionales y jamás ocasionó una tragedia.

Ante la situación país, él se vio obligado a taxear diariamente para rendir el dinero y viene a morir en un accidente de tránsito ocasionado por un “conductor borracho”.

Finalizó diciendo, “mi esposo mantenía a sus hijos y mi persona, y por la conducta alcohólica de un sujeto, ahora quedamos en el aire”.

LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
fotos | FAUSTINO PÉREZ