La ganadería ya no es una rentabilidad en los Valles de Tucutunemo

Alrededor de una décima parte de los Valles de Tucutunemo tiene algún grado de vinculación del sector ganadero y de cría, por lo tanto los sistemas de producción ganadera son considerados como la estrategia social, económica y cultural más apropiada para mantener el bienestar de esta comunidad -especialmente en el sector El Cedral-, debido a que es la única actividad que puede simultáneamente proveer el sustento diario de estos hogares, así como también ellos conservan el ecosistema, y ayudan en la colaboración a la producción agrícola.

La ganadería en los Valles de Tucutunemo
La ganadería como fuente secundaria en Los Valles de Tucutunemo

La segunda fuente económica de esta población rural es la ganadería y la producción de aves, pero debido a los altos costos de los insumos para la cría, la producción de carne, leche y sus derivados ha caducado 70%, son contadas las haciendas y fincas que mantienen activos sus corrales.

Así mismo los dueños de las reses, quienes pasan horas en las montañas pastoreando las vacas explicaron, “la mayor parte de los rebaños destinados a carne son criados en grandes extensiones de tierra, pero tras el destete (fin de la lactancia), los animales jóvenes pueden mantenerse estabulados (en establos)”.

También destacaron, “el ganado para leche se cría en rebaños relativamente numerosos, en condiciones de cría intensiva, cerca de grandes centros de población. Sin embargo, el queso, la leche en polvo y otros productos especializados proceden, por lo común de pequeñas granjas donde las vacas se alimentan con pasto”.

Los insumos para la cría de los animales son tan costosos como comprar una res, es por ello que los criaderos y galpones parecen un desierto, inclusive muchos de estos productores se han visto en la necesidad de emigrar a otros países, porque este negocio no les resulta.

Pedro Morales

Pedro Morales, obrero de una hacienda muy reconocida de los Valles de Tucutunemo, explicó, “ahorita no tenemos animales porque los sacaron al matadero, yo tengo 14 años trabajando con ganado y creo que es el mejor trabajo, porque es una fuente económica muy confiable. Vamos a sembrar maíz para poder alimentar a las reses”.

“Estamos acomodando todo para arrancar de nuevo con la cría de ganado, porque ya tenemos todas las instalaciones, sólo que por problemas de insumos y falta de alimentos tuvimos que llevarlos al matadero para convertirlos en capital para la nueva producción”.

Así mismo, Morales destacó que la cría de ganado no es para nada fácil, porque el mismo debe pasar por un ciclo de cuidados intensos para poder crear una buena fuente económica.

El vandalismo y la falta de insumos

También los antisociales han metido sus manos en la producción, y es por ello que los productores se han visto en la necesidad de quitar todos los criaderos y convertirlos en grandes parcelas. Así como también la falta de insumos ha sido un obstáculo para esta rama productiva.

Anthony Zapata, propietario de una finca comentó, “la delincuencia nos tiene azotados, así como el incremento de los insumos que no se consiguen ni siquiera en el mercado negro, en estos momentos no cuento con muchas reses, sólo las necesarias para medio mantenerse.

Sanidad en sistemas intensivos

Los dueños de las haciendas siguen apostando a un país productor de carne, es por ello que los pocos cuidados que pudiesen tener en la alimentación y partos de los animales, están bajo la custodia de los capataces y algunos veterinarios expertos en los cuidados; sobre ello Ramón Delgado manifestó que “existen enfermedades como la neumonía que es de alto índice de presentación en estos animales, y más aquí que el clima es muy frío, que seguramente son de mucha inquietud para los dueños, luego ya vienen enfermedades variadas y dependen generalmente de la procedencia de los animales. Los procesos digestivos en animales que ingieren cantidades significativas de alimento, son motivo de preocupación, y más ahora que en los mercados no se consigue el alimento necesario para este tipo de animales, es por ello que se han visto en la necesidad de alimentarlos con malojo, un alimento no grato para este tipo de animales, porque les causa mucho cólicos”.

Delgado también destacó que la digestión y el peso diario de estos animales “es un negocio en que la ganancia es la base de la rentabilidad”.

Hato de engorde

Normalmente un centro de engorde tiene sectores con animales de reciente llegada o corrales de recepción, en donde se concentran los que entraron en la última semana que están acostumbrándose a lo que será su dieta en los próximos 90 días, algunos comiendo insumos poco comunes para ellos, en estos corrales reciben los primeros tratamientos y vacunas. La siguiente etapa es el de desarrollo o levante, donde hay mejoras en la alimentación, es probable que los animales reciban tratamiento complementario o dosis de refuerzo de vacunas. La última etapa es la de acabado, en donde se mejora la dieta sustancialmente y además la presentación de la carcasa mediante la alimentación, buscando que la coloración de la grasa y carcasa sean agradables a la vista.

Los insumos son una problemática para la productividad de los ganaderos

Muchos de estos hatos se han visto en la necesidad de ser volados por su rentabilidad y la costosa inversión que trae, muchos de los productores han optado por tener a sus vacas y toros en una montañita comiendo pasto, ya no es factible tener hatos de engorde cuando no hay como abastecer los estómagos de los animales.

 

Expertos comentaron cómo fueron las construcciones de estos hatos que están en el abandono. “Sobre las dimensiones e infraestructura, el ganado de engorde debe tener un espacio ideal de 15 m2 por animal, para así evitar el hacinamiento. El espacio para la alimentación también es importante, el mismo podría tener dimensiones de 70 cm. por animal en el comedero. El área de sombra por animal está dentro de los 2 m2, los bebederos deben ser independientes por corral. De ello depende del lugar donde se estabule (criar y mantener el ganado), y si hay disponibilidad de forraje para así analizar si se usa cercos eléctricos o espacio para silos de almacenamiento de forraje disponible de la zona”.

También comentaron que se debe considerar un espacio de manga para el manejo de animales, zonas de administración, balanza, almacenes de alimento y materiales diversos, etc.

Campestres

El queso, la leche y las natillas son vendidos en efectivo

En una zona muy reconocida en los Valles de Tucutunemo, llamada “La Vaquera“, todavía existe la producción de leche y sus derivados, los habitantes, quienes madrugan día tras día, comentaron el procedimiento para obtener un buen queso de cincho y una buena natilla:
* José Antonio Gutiérrez, productor, quien trabaja con ganado desde que tenía 9 años de edad comentó: “Ahorita la producción de queso y leche está muy baja, pero sin embargo aún sigo produciendo, aunque los insumos sean un detonante en esta producción”.
* Diana Tovar, quien es la encargada de la preparación del queso de cincho, explicó su procedimiento: “Una vez que ordeñan las vacas, yo traigo la leche y la hiervo, allí mismo le agrego cuajo o rennet, que después proceso a taparlo en una de las ollas a esperar que el queso cuaje, aunque este es un procedimiento muy riguroso, yo lo explico simple para no dar mis tácticas”.

Tovar también informó que la producción ha decaído 80%, que ahora ellos no están exportando sus quesos a grandes ciudades, sino que los venden dentro de la comunidad, destacando que la venta del mismo tiene que ser en efectivo, porque ellos no cuentan con las herramientas necesarias para realizar una transacción bancaria.

Los Costos

El precio pudiese variar según sea el tipo de queso, si es de primera o de segunda, pero en un recorrido por varias haciendas de La Vaquera, comentaron que el costo de un kilo de queso está en 14 mil bolívares, así como el queso de mano en 4 mil bolívares, y el litro de leche en 2 mil bolívares, vale la pena acotar que estos productos son vendidos en efectivo.

Maura Tovar

Maura Tovar destacó que la natilla es lo más llevado diariamente, es por ello que se esfuerza diariamente para que las ventas no decaigan; “yo todos los días hago 20 litros de natilla, por los momentos ha causado sensación en el mercado, yo trato de hacerla lo mejor posible, porque con ella es que puedo alimentar a mi familia, sin embargo nosotros estamos bien posicionados, porque en el campo de algo se vive, y el que se muere de hambre aquí es porque le mete a la flojera”.

También destacó que los productores agrícolas se benefician del estiercol que dejan las vacas en los corrales, y ella lo ha tomado como un segundo negocio, “debido a la falta de materia para la producción en cuanto a la agricultura, yo me he visto en la necesidad en vender el excremento de las vacas que sirve como estiercol para la siembra, y creo que es mejor porque no tiene reactivos químicos“.

Desde tempranas horas el ganado es pastoreado por sus capataces

Por otra parte, Diana Tovar finalizó diciendo, “nuestro país posee recursos agrícolas, ganaderos, pesqueros y forestales que le son de vital importancia para su desarrollo económico y social. Se debe trabajar para incrementar la producción de la cría ganadera que puede dotar al país de una fuente de alimento seguro, dándonos la soberanía alimentaria tan ansiada, pero este Gobierno no abastece este rubro, pero quiero que sepan que nosotros los productores y agricultores si tenemos brío para la producción y cría de animales, que apuesten a nosotros, tal vez seríamos nosotros quienes podamos sacar a este país adelante”.

CÉSAR ORTEGA (pasante) | elsiglo